La conjuntivitis se da por la reacción de una
bacteria que entra al ojo; esto puede adquirirse por diferentes causas, lo
importante es saber que se trata de una infección. Muchas veces no percibimos en donde
pueden encontrarse estas bacterias, por lo que no le damos mucha importancia a
la higiene, por ejemplo de las manos.
El smog y la
contaminación son dos de los factores que más influyen en las infecciones
oculares, sobre todo en la conjuntivitis.
Muchos de nosotros
adoramos a nuestra mascota, incluso podemos dormir con ellos. Pero, muchas
veces no es la mejor opción, pueden provocar fácilmente conjuntivitis y otro
tipo de infecciones, en la piel por ejemplo.
El cloro de la
piscina, es muy irritante para los ojos, y muchas personas, incluso, abren los
ojos debajo del agua. Esto puede ser terrible para los ojos y como consecuencia
causar conjuntivitis.
Una de las peores
costumbres que tenemos es tallar los ojos, y casi siempre lo hacemos con las
manos sucias, sobre todo por el cansancio ocular que nos provoca la
computadora, la cual está llena de suciedad, sobre todo el tablero.
La manzanilla es excelente para aliviar molestias en
los ojos, pues produce un efecto calmante. Después de colocar dos bolsitas de
té de manzanilla a hervir, aplícalas en tus ojos y déjalos durante 30 minutos.
El pepino también es muy efectivo como remedios
caseros, pues además de reducir la molestia de los ojos, también reduce la
inflamación considerablemente. Aplica una rodaja de pepino en cada ojo y
posteriormente enjuaga con agua fría.
El té verde contiene propiedades antisépticas, es
decir que reduce la infección, por eso es muy efectivo para la conjuntivitis.
Coloca una bolsita de té verde en cada ojo durante media hora.
Para reducir la
molestia. Remoja dos algodones con agua
fría y haz presión en cada uno de los párpados. El agua a baja temperatura
reduce la molestia y da alivio.
Las gotas de suero son muy efectivas para aliviar la
irritación. Aplica dos gotas en cada ojo cada 8 horas.
No compartas tus
gafas, mucho menos tus lentes de contacto, pues la conjuntivitis es altamente
contagiosa y más vale evitarlo. Es muy importante que identifiques los primeros
síntomas y las posibles causas. Acude inmediatamente con tu oftalmólogo para
que te dé el tratamiento que se necesita llevar a cabo, y hazlo al pie de la
letra.
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