Antes de volver al colegio, hay muchas cosas por
hacer. Una de las más importantes es realizar la consulta con el pediatra,
el oftalmólogo y el otorrinolaringólogo.
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El pediatra atenderá temas puntuales, los más
importantes son:
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Asegurarse de que el calendario de vacunación esté al día. Por eso, es
importante llevar siempre la libreta
sanitaria a la consulta.
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Recordar que el peso que el niño cargue en la mochila no debe superar el 10% del peso
corporal, ya que esto evita problemas en la columna.
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Recomendar que lleve una vianda al colegio para el recreo: siempre es preferible una
colación sana antes que comprar en el quiosco.
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Derivar al oftalmólogo
para un control de la agudeza visual.
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Consultar a un otorrinolaringólogo para evaluar la audición y realizar un examen
completo.
Nos vamos a detener en este último punto. Así como
es fundamental controlar la agudeza visual, debemos tener
presente que evaluar la audición en el niño antes
de comenzar las clases es importante no solo para asegurar un buen rendimiento
académico, sino que es una excelente oportunidad para detectar cualquier tipo
de alteración que pueda tener.
El especialista comenzará por una minuciosa
investigación sobre la historia familiar y los datos
relacionados con enfermedades de nariz, garganta y oído. Luego, realizará el
examen físico, en el que evaluará:
Las fauces (la garganta): es muy
importante mirar la faringe, el tamaño de las amígdalas, la forma del paladar,
el tipo de mordida del paciente y el desarrollo de la dentición (en caso de
detectar alguna anomalía, solicitará la interconsulta con el odontopediatra).
Las fosas nasales: muchas
veces se puede ver la coloración de la mucosa y el tamaño de los cornetes; esto
permite sospechar la presencia de alguna patología como la rinitis alérgica
(proceso inflamatorio de la mucosa que recubre las fosas nasales y produce
sintomatología: la nariz chorrea, se tapa y aparecen estornudos y picor).
Los oídos: el profesional usa el otomicroscopio, un
aparato que permite ver el conducto auditivo externo con gran aumento. Se
evalúa la presencia de cera, que es normal en cantidades pequeñas. Si la
cantidad de cera es excesiva, se debe extraer. El aspirador de cera hace mucho
ruido y suele asustar a los niños pequeños, pero es importante para evaluar el
estado de la membrana timpánica.
La consulta se completa con el pedido de estudios audiológicos: audiometría tonal, impedanciometría y timpanograma, que complementan el
examen clínico y permiten conocer el estado exacto de la audición.
Es importante recordar que estamos transitando los
últimos días del verano: las mañanas y los atardeceres comienzan a ser más
frescos. Es así que pueden aparecer síntomas como dolor de garganta, fiebre y
nariz tapada. Se recomienda llevar siempre un abrigo liviano para estas horas
del día y consumir jugos naturales de frutas cítricas, ricas en vitamina C,
para prevenir los resfríos y los cuadros gripales. SMC
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