domingo, 20 de octubre de 2024

La Oración Dominical – 20 de Octubre…

Ofrecemos estos breves puntos con la intención de que puedan servir para la meditación individual o comunitaria. Son tomados de las lecturas y de las oraciones de la misa del domingo 20 de octubre de 2024.
Se dividen en tres partes: lo que Dios nos dice (con un comentario que nos puede ayudar a comprender el Evangelio); lo que nosotros podemos decirle a Él como respuesta; y de qué modo podemos llevarlo a la vida cotidiana. Dios quiera que ayuden a muchos a dedicarle, cada domingo, un tiempo especial a Dios, nuestro Señor.
Dios nos habla
                  “Mi Servidor justo justificará a muchos y cargará sobre sí las faltas de ellos” (Isaías 53,11).
                  “El que quiera ser grande, que se haga servidor de ustedes; y el que quiera ser el primero, que se haga servidor de todos. Porque el mismo Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud” (Mc 10,45).
                  “Ya que tenemos en Jesús, el Hijo de Dios, un Sumo Sacerdote insigne que penetró en el cielo, permanezcamos firmes en la confesión de nuestra fe. Porque no tenemos un Sumo Sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades; al contrario, Él fue sometido a las mismas pruebas que nosotros, a excepción del pecado. Vayamos, entonces, confiadamente al trono de la gracia, a fin de obtener misericordia y alcanzar la gracia de un auxilio oportuno” (Hbr 4,14-16).
Reflexión
No sabéis lo que pedís. No es tiempo de coronas y de premios, sino de combates, luchas, sudores, de pruebas y de peleas. Esto es lo que significa la frase: No sabéis lo que pedís¿Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar? En este pasaje llama cáliz y bautismo a su cruz y a su muerte: cáliz, por la avidez con que lo apura; bautismo, porque por medio de su muerte iba a purificar el orbe de la tierra; y no sólo lo redimía de este modo, sino mediante la resurrección, si bien ésta no le resultaba penosa” (San Juan Crisóstomo, Homilía 7 contra los anomeos).
Nosotros le hablamos
                  “Señor, que tu amor descienda sobre nosotros, conforme a la esperanza que tenemos en ti” (Salmo 32).
                  “Yo te invoco, Dios mío, porque tú me respondes; inclina tu oído hacia mí y escucha mis palabras. Protégeme como a la pupila de tus ojos, escóndeme a la sombra de tus alas” (Antífona de entrada).
                  “Dios todopoderoso y eterno, concédenos permanecer fieles a tu santa voluntad y servirte con un corazón sincero. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios por los siglos de los siglos” (Oración colecta).
Nuestra vida cambia
                  ¿Mi fe en Jesús me lleva a imitarlo?
                  ¿Trato de servir a los demás y dar mi vida, en lo cotidiano, para que otros se acerquen a Dios?

2 comentarios:

  1. Que se haga en mj según tu Santa Voluntad.Amen.

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  2. SEÑOR DE LOS CIELOS CONCEDENOS FIDELIDAD, HUMILDAD SERVICIO DE CORAZON A UN DIOS QUE NOS PROTEJE Y ESCUCHA NUESTRAS PETICIONES JUNTO A SU ADORADO HIJO CRISTO JESUS.AMEN.

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