El
hecho de que la mayoría de las personas consuman demasiada sal a diario no es
ninguna novedad. De hecho, una persona promedio consume 3.400 mg de sodio al
día, lo que supone casi un 50% más que la cantidad diaria recomendada de 2.300
mg para todas las personas mayores de 14 años.
Los
alimentos tienen demasiada sal incluso antes de tomar el salero
Aunque
intentes comer de forma saludable, es posible que consumas demasiada sal sin
darte cuenta, y no eres el culpable. En un nuevo e impactante informe, la FDA
reveló que el 70% de la ingesta de sal de un estadounidense proviene de
alimentos comprados en tiendas durante la preparación de alimentos comerciales.
¿Sabías,
por ejemplo, que solo una taza de requesón contiene la cantidad de 920 mg de
sodio?
Y este
es solo un ejemplo de los muchos alimentos con alto contenido de sodio que
nunca esperarías que contuvieran tanta sal. Por supuesto, la sal hace que los
alimentos tengan mucho mejor sabor y extiende la vida útil de los alimentos,
pero también debemos recordar que una dieta alta en sodio aumenta el riesgo de
sufrir problemas cardiovasculares, enfermedades cardíacas, daño renal, ciertos
tipos de cáncer y una serie de otros problemas de salud.
Por
este motivo, la FDA emitió una guía formal para que las empresas reduzcan
modestamente el contenido de sodio en sus productos en los próximos dos años y
medio. Dado que estos alimentos constituyen la mayor parte del consumo de sal
de los estadounidenses, la iniciativa debería poder reducir la ingesta diaria
de sodio del público a 3.000 mg al día en los próximos años.
Aunque
este margen no es ideal, se sugiere que este es solo el primer paso de la
iniciativa de la FDA para reducir el consumo de sodio en todo el país. “Para
reducir de manera efectiva la preferencia de la población por los alimentos con
alto contenido de sodio, es necesario disminuir lentamente la cantidad agregada
a los alimentos de manera uniforme en todo el suministro de alimentos (por ejemplo,
no funcionará reducirla en las papas fritas si no hace lo mismo con las sopas,
las cenas congeladas y los maníes). Para tener éxito, es una cuestión de ‘manos
a la obra’”, dijo el profesor Taylor C. Wallace, del Departamento de Nutrición
y Estudios de Alimentos de la Universidad George Mason en Virginia.
La
nueva guía concierne a todos los fabricantes de alimentos y a varios productos,
desde pizza y papas fritas hasta comidas congeladas. Por lo tanto, a las
empresas solo se les recomienda que cumplan con estas nuevas pautas, pero no se
les exige que las cumplan, por lo que puede llevar tiempo y una regulación más
estricta para que la iniciativa comience a funcionar.
Mientras
tanto, puede volver a tomar el control de su consumo de sodio en lugar de esperar
a que las empresas de alimentos cumplan. La mejor manera de hacerlo es
minimizar la cantidad de alimentos procesados en su dieta y cocinar la
mayoría de los alimentos con alimentos frescos. JQR
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