Amigos…

Amigos… (19-07-14)

Son parecidos los conceptos, la condición de amigo/a, es la misma, es un sentimiento hermoso que no siempre es bien entendido, valorado o respetado.

Sabes lo bueno que es ser amigos con los hijos... en una relación de pareja… con los compañeros de actividades... con la gente que te gusta, amigos de aquellos, los muchos, los que no existen, los ninguno, los que viven en la precariedad, en la indigencia, los olvidados...

Amigos si, de los “irrespetuosos”, que no tienen en cuenta fronteras, credos o razas; amigos de los “virtuales”, que aprendes a querer como si los hubieses conocido desde siempre...

He tenido buenos, impagables y eternos amigos/as. He perdido amigos/as en el transcurso de los años, me he defraudado de sentimientos de amistad, que con el cambio de vida, intereses se han diluido entre las hojas de los almanaques.

He confiado inmensos secretos a un amigo/a, me he guardado historias personales de amigos/as, he llegado a dar lo mejor, a esperar lo mejor a valorizarla quizás más que si me hubiese unido una consanguinidad.

He ganado, he perdido, he empatado... he vivido. Se ser amigo, siempre lo fui, pero he aprendido a no esperar tanto de los amigos/as.

Comprendí, que lo mejor en la amistad es, no conocer de matemáticas, para evitar restar tiempo, sumar favores, dividir incomprensiones o multiplicar afectos.

Soy buen amigo, y me esmero por ello y trato todos los días de mejorar, de intentar poner todo de mi... tal vez ese sea el secreto de la vida... dar, lo que uno considera lo mejor, que no siempre es mejor para el otro... pero si, para nosotros...

¡Ahh!... hablando de esto, te deseo con todo mi corazón, que este nuevo amanecer te depare ¡Un muy feliz día amigo/a!  (Alejandro Domenicone)