sábado, 14 de febrero de 2015

El ABC del prolapso uterino - cómo reconocerlo a tiempo

El ABC del prolapso uterino - cómo reconocerlo a tiempo

¿Qué es el prolapso uterino?
El prolapso uterino está referido al descenso del útero a través de la vagina debido a la relajación y debilitamiento del sistema de sostén formado por los músculos del suelo pélvico y de los ligamentos y fascias.

¿Qué factores se deben tener en cuenta?
Hoy, la consulta temprana ante el inicio de los síntomas es de vital importancia, ya que de no mediar tratamiento, el progresivo debilitamiento del soporte uterino podría causar síntomas más graves.
Los factores de riesgo más importantes para desarrollar esta patología son variados, destacándose los múltiples partos, bebes de gran tamaño y la utilización de fórceps. En los casos en que el prolapso aparece en mujeres nulíparas y jóvenes, sin otros factores de riesgo asociados, es posible que la causa sea secundaria a enfermedades por defectos en la matriz del colágeno.
También se asocia en menor medida a pacientes que sufren de tos crónica, obesidad, levantamiento de peso y la realización de abdominales ya que todas estas prácticas provocan aumento de la presión abdominal.
Estos factores, asociados al envejecimiento y disminución de estrógenos luego de la menopausia, pueden colaborar al desarrollo de prolapso en grados avanzados. Si bien es frecuente que se desarrolle un pequeño grado de prolapso con la edad, éste no suele causar síntomas. No obstante, en grados más avanzados, puede provocar molestias, sensación de presión o bulto en la vagina el cual se puede incrementar con la tos, la bipedestación y durante la defecación.

La importancia de un buen diagnóstico
La mujer debe consultar con su médico ante sensación de presión o pesadez en la vagina, incontinencia urinaria, molestias en las relaciones sexuales, protrusión de masa hacia la abertura vaginal, infecciones urinarias a repetición o sangrado vaginal inusual.
El médico realizará un examen mediante visión directa de la zona genital tanto en decúbito, de pie, en reposo y mediante maniobras de provocación, asociado a un correcto interrogatorio de los signos y síntomas y la evaluación del historial de cada paciente en particular.
Cuando el médico se encuentre ante el diagnóstico de prolapso y desee conocer el grado del mismo, solicitará un estudio de resonancia magnética (RM) a fin de confirmar el mismo, caracterizarlo y clasificarlo.
Dependiendo de la edad de la paciente, si ya tiene hijos y si cuenta con enfermedades asociadas y el grado de prolapso que presente la paciente en la RM, el profesional definirá un tratamiento conservador con ejercicios específicos que fortalecen la musculatura pelviana en casos leves, la utilización de un pesario, que es un dispositivo de plástico en forma de anillo o en casos avanzados la corrección quirúrgica.
La resonancia magnética es el método ideal que nos va a permitir determinar la magnitud de los defectos de las estructuras de soporte y el grado de compromiso que presentan, además de brindarnos información sobre todos los compartimientos de la pelvis, evaluar si existe algún grado de prolapso de los órganos adyacentes y otras patologías asociadas.
El estudio cuenta con dos etapas: La primera etapa es estática, en reposo, donde se evalúan las regiones anatómicas de la cavidad pelviana, gracias a su alta resolución tisular que permite evaluar en detalle las estructuras de sostén del piso pelviano. La segunda etapa de la evaluación consta de secuencias dinámicas que se realizan con maniobras de valsalva que nos permite ver las relaciones de los diferentes órganos pelvianos entre sí en forma simultánea y en movimientos (reproduciendo los movimientos cotidianos como simular el acto de defecar, aumentando la presión abdominal) y mostrando la relación de éstas con las estructuras óseas y musculares adyacentes.
Debido a esto, la RM resulta un método cada vez más utilizado debido a no sólo su mayor accesibilidad, sino que es altamente específico para esta patología, que permite adecuar el estudio mediante diferentes parámetros técnicos, a la evaluación detallada del piso pelviano.
Es un método muy confiable cuando esta adecuadamente indicado y principalmente cuando se lo realiza en centros especializados con profesionales médicos de experiencia en esta patología, debido a la gran cantidad de información que puede brindar ya sea en el diagnóstico inicial de prolapso, en la evaluación pre o postquirúrgica, tanto en los casos simples como en casos de defectos complejos y cuando se programan reparaciones complicadas. Dra. DG

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