Estos
insectos, que aparecen con la llegada de los días calurosos, se esconden en
zonas húmedas y oscuras, como el agua estancada.
El
verano pasado Argentina sufrió una gran cantidad de casos de dengue, virus
transmitido por el mosquito conocido como Aedes aegypti. Con el arribo de la
primavera, estos insectos están reapareciendo de a poco y nadie quiere quedarse
sin su repelente.
Sin
embargo, no siempre se consigue o se tiene un insecticida a mano. Es por eso
que hay varias sustancias y mezclas naturales para poder ahuyentar a los
mosquitos. O mismo se pueden hacer repelentes caseros con productos que se
encuentran en la mayoría de las casas.
Estos
insectos se pueden encontrar en áreas húmedas y oscuras. Se esconden en cada
rincón: debajo de los muebles, en lavaderos abandonados, detrás de cortinas
descuidadas, en baños y cocinas olvidados, y tras puertas entreabiertas que
guardan secretos de incuria. Algunas plantas con agua estancada en sus macetas
también brindan un cultivo perfecto.
Recipientes
con agua acumulada, como botes de basura convertidos en estanques de desidia,
baldes de abandono, charcos de indolencia y bebederos de mascotas. Incluso
lonas de plástico, que cubren objetos, pueden generar humedad y un ambiente
ideal para los mosquitos.
Desde
mediados del siglo XX, el aceite esencial de eucalipto limón es uno de los
repelentes naturales más populares. Los Centros para el Control y la Prevención
de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos avalan su uso como componente eficaz en
formulaciones repelentes contra los mosquitos.
Además,
un estudio australiano y publicado en la revista Journal of the American Mosquito Control Association, logró evidenciar
que una mezcla de 32% de aceite de eucalipto con limón tuvo una eficacia mayor
al 95% de protección contra los mosquitos, durante un periodo de 3 horas.
La
lavanda, una planta aromática cultivada por sus atractivas flores de tonos
púrpuras, ofrece múltiples beneficios más allá de su agradable fragancia. En
Corea del Sur, investigadores descubrieron que el aceite extraído de las flores
machacadas de lavanda actúa como un eficaz repelente natural contra los
molestos mosquitos. Los ensayos fueron con ratones sin pelo.
Además
de ahuyentar a los mosquitos adultos, la lavanda posee propiedades analgésicas
que alivian el dolor, antifúngicas que combaten hongos y antisépticas que
previenen infecciones.
Según
la sociedad estadounidense de química, el aceite de canela es un método natural
prometedor para combatir el mosquito. Se prepara hirviendo medio litro de agua
con ramas de canela durante 10 minutos. Luego se deja enfriar, se cuela y se
mezcla con un poco de aceite para bebés. Esta solución actúa como repelente e
insecticida contra huevos y mosquitos adultos de forma ecológica.
Según
un estudio con animales, el aceite de tomillo resultó ser un potente repelente
contra los mosquitos transmisores de la malaria. Al aplicar una concentración
del 5% de este aceite en la piel de ratones sin pelo, se obtuvo una tasa de
protección del 91%.
Para
preparar este repelente casero a base de tomillo, se recomienda combinar 4
gotas de su aceite esencial por cada cucharadita de un aceite base como el de
oliva o jojoba. Esta fórmula natural puede ser una alternativa efectiva para
prevenir las molestas picaduras de los mosquitos de la malaria.
Según
un estudio publicado en la revista Scientific
Report, investigadores estadounidenses demostraron que el aceite de clavo,
gracias a su principio activo eugenol, puede proteger contra las picaduras de
mosquitos durante más de 90 minutos cuando se aplica en loción al 10% de
concentración.
Un
equipo multidisciplinario integrado por investigadores del Instituto de Biotecnología Farmacéutica y Alimentaria (INBIOFAL),
dependiente del CONICET y la Universidad Nacional de Tucumán, junto con
estudiantes y docentes de la Escuela Secundaria de Amberes, desarrollaron un
proyecto piloto de un innovador repelente natural contra el mosquito transmisor
del dengue.
Este
producto, apto para aplicar en personas de todas las edades, brinda una
protección de aproximadamente tres horas contra los mosquitos Aedes aegypti,
vectores del virus del dengue. Su formulación se basa en ingredientes
naturales: la citronela (Pelargonium graveolens) y el lemon grass (Cymbopogon
citratus), dos plantas aromáticas reconocidas por sus propiedades repelentes.
El
vinagre es un producto versátil. Sus propiedades desinfectantes y
desengrasantes lo convierten en un aliado eficaz para dejar las superficies
impecables y con brillo. Además, su aroma penetrante actúa como repelente
natural contra los molestos mosquitos.
Se
recomienda colocar recipientes con una mezcla de partes iguales de vinagre y
agua en lugares estratégicos como puertas y ventanas. Es importante renovar la
mezcla cada vez que se enturbie o acumule residuos para garantizar su eficacia.
La
OMS y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de
Estados Unidos reconocen el potencial de los aceites esenciales de plantas,
como el aceite de eucalipto, como repelentes naturales contra insectos,
particularmente los mosquitos.
Según
contó la Dra. Raquel Gleiser de la Universidad Nacional de Córdoba y el CONICET
de Argentina, en investigaciones detectaron propiedades repelentes en aceites
de unas 18 especies de plantas. Los más efectivos fueron los aceites de
pachana, romero, cedrón y eucalipto, incluso diluidos. También mencionó que los
aceites de tagetes y peperina tienen propiedades repelentes.
Un
artículo investigó la síntesis verde de nanopartículas de zinc de eucalyptus
globulus y su uso en la formulación de pinturas antimicrobianas repelentes de
insectos de producción industrial. Los científicos concluyeron que al modificar
la pintura con extractos vegetales y nanopartículas se mejoran las propiedades
repelentes de insectos y antimicrobianas de los recubrimientos. Sugirieron
seguir investigando sobre el tema por su impacto global, ya que la
nanotecnología tiene un potencial transformador en la industria de la pintura.
Esta
trampa casera para mosquitos puede utilizarse en diversos espacios, como las
habitaciones del hogar. Además, se puede elaborar con más productos, como
bicarbonato de sodio o vinagre, siguiendo unos sencillos pasos.
Primero
se debe llenar un recipiente pequeño con agua. Luego, en el mismo bowl hay que
agregar una cucharada de azúcar y un chorrito de detergente para lavar los
platos. Por último, simplemente colocar el recipiente en áreas donde haya mayor
presencia de mosquitos.
Los
mosquitos se acercarán atraídos por el dulzor de la preparación, pero quedarán
atrapados en la solución debido a la acción del detergente. Así, el cuarto no
estará repleto de mosquitos. No se debe pasar por alto el recambio de la mezcla
en el recipiente tras unas horas de acción.
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