jueves, 2 de marzo de 2017

¿Qué hacer cuando su cónyuge está frío?


¡Muchas veces hay enfriamiento en las relaciones matrimoniales y si no se cuidan resulta ser muy peligroso!
La causa principal del enfriamiento en un matrimonio suele ser la rutina. Ambos cónyuges caen en un estado de inconsciencia con respecto a la realidad de que el matrimonio es como un organismo vivo que necesita alimento y cuidado permanente. La corriente de la vida y las responsabilidades del diario vivir hacen que muchos matrimonios pierdan interés en mantener la relación. Lo más grave es que esta situación es generalmente inconsciente.
Otra causa común del enfriamiento matrimonial ocurre por conflictos no resueltos que van minando la voluntad de uno de los dos o ambos. Esos conflictos no resueltos producen una especie de resentimiento que si no se saca a la luz y se conversa, se va acumulando como carga en una bodega y llega el momento en que la persona tiene una sensación de cansancio y de asfixia y ya no quiere seguir compartiendo con el otro(a).
Frecuentemente ocurre que como consecuencia de los conflictos no resueltos, las constantes discusiones, uno de los dos recibe atención de una tercera persona y esa relación empieza a crecer aprovechándose de la negatividad en el matrimonio. En este proceso naturalmente el cónyuge que está cayendo en la infidelidad se va volviendo cada día más frío y más ausente en el hogar.
Cualquiera que sea la causa del enfriamiento de uno de los cónyuges o de ambos, la medicina es la misma: Deben ponerse de inmediato en campaña para defender el matrimonio. Esto implica un cambio de actitud inmediato. En vez de pelear, asumir una actitud de conciencia y buscar ayuda con un consejero matrimonial, hacer un curso para matrimonios, asistir a eventos para Matrimonios, etc. Por si solos va a ser muy difícil que puedan salir adelante. Por lo general cuando una pareja llega a ese punto de enfriamiento en su relación, ya no tienen la fuerza emocional para arreglar las cosas por si solos, ya que hay mucho resentimiento y además no tienen el conocimiento ni las herramientas para salir adelante. Necesitan buscar ayuda urgente.
Si uno de los cónyuges no quiere buscar ayuda y el otro si, el que tiene la actitud de arreglar las cosas puede buscar ayuda individualmente. Es bastante frecuente que cuando uno de los cónyuges aprende a manejar los conflictos y cambia de actitud con guía y soporte adecuado, el otro cónyuge nota el cambio y poco a poco se dispone a aceptar también la ayuda.
No dejen que el enfriamiento en la relación llegue a niveles muy profundos, porque entre mas distanciamiento se dé, es más difícil y costoso es el regreso. Si ha habido enfriamiento en tu relación matrimonial, reconócelo y busca ayuda de inmediato. Ora y pídele dirección al Señor para buscar la mejor ayuda disponible.
Tu matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado. ¡Cuídalo! LyHF

No hay comentarios.:

Publicar un comentario