Durante 27 años de mi vida me tragué el cuento de que la
mujer tenía que realizarse fuera de la casa. Había que estudiar y luego
trabajar mucho y subir la escalera corporativa en alguna empresa. Teóricamente
eso me daría mucha felicidad y satisfacción. Y así lo hice. Terminé la
Universidad y tomé un trabajo en una empresa multinacional. Después de cuatro
años trabajando de sol a sol, porque entraba a las 9 de la mañana, pero no
sabía a qué hora iba a salir, conocí a una persona que me tiró un balde de agua
fría.
Después de escuchar toda mi cátedra de lo importante que era
que las mujeres trabajaran para sentirse realizadas, porque cambiar pañales no
era suficiente para nuestro intelecto, él me dijo:
“Qué bueno que hay mujeres como tú, que trabajan para hacer
una diferencia, pero yo no veo un trabajo que haga más diferencia y que sea más
trascendental que el ser mamá. Ahí haces la diferencia, en educar a personas
honradas y que ayuden a salir adelante al país. El trabajo de ser mamá es de
gran importancia en el mundo, en una empresa siempre serás útil, pero nunca
serás indispensable; en una familia una madre es indispensable”.
En ese momento sentí que toda mi existencia era superficial.
En ese momento todo lo que yo había creído durante TODA MI VIDA se venía abajo
y se me presentaba la realidad en crudo.
Al poco tiempo me casé con ese hombre. Tomamos la decisión de
que después de que naciera nuestro primer hijo, yo podría elegir regresar a
trabajar o no hacerlo. Pero recuerdo como si fuera ayer, cómo mi hija a la edad
de tres meses lloraba, pero al verme entrar al cuarto dejó de llorar y sonrió…
en ese momento me di cuenta de que NADA, ABSOLUTAMENTE NADA QUE YO HICIERA EN
UNA OFICINA ME DARÍA ESA SATISFACCIÓN. Esa satisfacción de ser necesitada y
amada por una personita tan vulnerable.
Fue una decisión difícil, ya que todos incluso familiares
cercanos me decían: “para qué estudiaste tanto para cambiar pañales…”
Claro que los años han pasado y probablemente ya no seré tan
necesaria como lo era cuando mis hijos eran chicos, pero con una buena
preparación y fuerza de voluntad, lograré insertarme en el ámbito del trabajo.
Aunque insisto que nunca tendré la satisfacción que tengo cuando mis hijos me
llaman MAMÁ. MG
TODO ESO ES MUY CIERTO Y LA PALABRA MAMÁ SIGNIFICA MUCHO POR ESO NUESTRA LINDÍSIMA MADRE SANTÍSIMA ESCUCHÓ AL ANGEL QUE LE DIJO QUE ELLA IBA HA SER MADRE Y ELLA LE CONTESTÓ QUE SE HICIERA Y CUMPLIERA SU BENDITA VOLUNTAD PORQUE SU HIJO ERA POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO Y TAMBIÉN ES NUESTRA LINDÍSIMA MADRE SANTÍSIMA AMÉN ASÍ SEA AMÉN 🙏🙏🙏
ResponderBorrar