La frase ‘la dosis hace al
veneno’ nunca ha sonado más cierta. Este caso médico crea conciencia sobre la
toma de vitaminas y suplementos dietéticos de manera más responsable. Cuenta la
historia de la vida real de un hombre australiano que perdió la capacidad de
caminar como resultado de una sobredosis de suplementos de vitamina B6. ¿La
causa? Una afección llamada toxicidad por vitamina B6 provocó un daño
persistente en los nervios de sus piernas, lo que desencadenó una afección
llamada neuropatía periférica y lo envió a una silla de ruedas. Antes de
continuar, seamos claros. La toxicidad de la vitamina B6 es bastante rara y,
según los informes, el hombre australiano había estado tomando 70 veces la
dosis recomendada de vitamina B6 para su edad.
Los problemas comenzaron
cuando el hombre de 86 años se hizo un análisis de sangre que mostró que tenía
deficiencia de vitamina B6. En ese momento, había vivido de forma independiente
y mantenido un estilo de vida activo según su hija Alison Taylor, quien optó
por mantener en privado el nombre de su padre. El médico le había recetado al
hombre un suplemento de vitamina B6 de 50 miligramos para compensar la leve
deficiencia. Aunque las deficiencias de vitamina B6 son más comunes en los
adultos mayores, una dosis de suplemento de 50 mg es astronómicamente alta.
Para darle una perspectiva, la dosis diaria estándar de vitamina B6 recomendada
tanto en Australia como en el resto del mundo es de 1,7 miligramos por día para
hombres de 50 años o más. Además, el suplemento no era la única fuente de
vitamina B6 en la dieta del hombre. Aparte de las fuentes de alimentos
ordinarias, como las papas o el pollo, el australiano también comió un cereal
de desayuno fortificado con B6 y estaba tomando un suplemento de magnesio que
contenía B6. Y la sobredosis extrema de la vitamina, que de otro modo sería
beneficiosa, fracasó en gran medida.Para aquellos que no lo saben,
la vitamina B6 (o piridoxina) es una vitamina esencial que juega un papel
importante en el metabolismo de los carbohidratos y las proteínas. Además,
satisfacer las necesidades diarias de esta vitamina previene enfermedades
crónicas, como la pérdida de la visión, el cáncer, la demencia y la artritis.
La vitamina B6 también juega un papel clave en la salud inmunológica y mental.
Dicho esto, una sobredosis de vitamina B6 parece ser tan peligrosa como una
deficiencia. Según la hija del hombre, los efectos de la sobredosis de
vitaminas se hicieron evidentes en cuestión de meses. Todo comenzó con una
pérdida de sensibilidad en las piernas y rápidamente degeneró en un daño severo
y debilitante en los nervios. “Hace doce meses estaba manejando. Ahora está en
un hogar de ancianos y en silla de ruedas”, dijo Taylor a ABC Radio Melbourne.
El daño a los nervios causado
por una sobredosis de vitamina B6 es bastante poco común. Según la Academia
Estadounidense de Neurología, la piridoxina es una vitamina soluble en agua y
las cantidades excesivas se excretarán a través de la orina. Sin embargo, las
dosis suplementarias extremadamente altas (200 mg o más) ciertamente pueden
conducir a una pérdida de sensibilidad en las piernas y daño a los nervios. El
hombre australiano se encuentra actualmente en terapia física. Muchos pacientes
pueden recuperar la capacidad de caminar después de suspender el suplemento de
vitamina B6, pero aún no está claro si el hombre podrá recuperarse por
completo.
Con suerte, esta triste
historia llamará su atención sobre un problema emergente: miles de personas
están tomando cantidades tóxicas de vitaminas y suplementos, algunas sin la
supervisión de un médico. Aunque la vitamina B6 no es, con mucho, el principal
sospechoso de la lista (los suplementos de melatonina y vitamina A llevan ese
título), cada vez se informan más casos similares de toxicidad en todo el mundo.
Así que tenga cuidado y revise cualquier suplemento que esté tomando con un
profesional médico. JQR
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