El
ideal de los Siervos de María ha suscitado en torno a las comunidades o ha
asociado a la Orden, numerosas familias y grupos, que constituyendo expresiones
particulares de vida consagrada o laical, participan de la vocación.
Con
ellos se mantienen relaciones de colaboración espiritual y apostólica.
Por
ello, los frailes Siervos de María, continuando una antigua y viva tradición,
constituyen una sola familia con las Monjas Siervas de María de clausura, las
Religiosas Siervas de María y con los miembros de los Institutos Seculares, de
la Orden Seglar y de los Grupos Laicos.
En
la familia Servita se comparte el mismo ideal, los compromisos de vida
evangélico-apostólica y la piedad hacia la Madre de Dios, realizando en la
propia consagración a Dios y en el mismo espíritu de los Siete Santos Padres un
común crecimiento religioso y un servicio apostólico más eficaz.
La
Orden de los Frailes Siervos de María está presente hoy en los cinco
continentes con unos 1000 frailes, religiosas y monjas Siervas de María. OSM
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