Compartir, ayudar y motivar son las prioridades de este blog, tratando de iluminar el camino de nuestros semejantes con nuestra pequeña luz interior, basados en tres pilares fundamentales: "Respeto, Humildad y Honestidad"
lunes, 31 de enero de 2022
Armik - Serenata...
Edgar Tuniyants - Música suave...
Un científico debe...
Ser rectos...
Pablo de Trois-Châteaux, Santo
De entre esos pocos nombres, del único del que se está completamente seguro de su existencia es del santo que conmemoramos hoy, y de hecho, de esos nueve aludidos antes, que han llegado a figurar todos en el santoral, el Martirologio Romano actual ha conservado solo a este. ¿Cuáles son los signos de esta certeza? a decir verdad, no muchos: ante todo, el propio lugar tomó más tarde el nombre del santo, de tal modo que se pasó a llamar -y así es en la actualidad- Saint-Paul-Trois-Châteaux; la presencia en los toponímicos es un indicio firme de tradición cúltica y de la importancia del personaje para el sitio. Además, aparece mencionado en el Martirologio de Adón (siglo IX); y puede razonablemente identificarse con el obispo Pablo que firma en el concilio de Valence del 374. Si esta identificación es cierta, podría haber sido el fundador de la sede, aunque en los listados no aparece en primer lugar, sino precedido de un obispo que hoy se considera legendario (Restituto), o en un puesto más tardío de la sucesión.
Más allá de eso se teje, como casi siempre, la leyenda, que no nos sirve para tener datos concretos del santo, pero sí al menos para constatar que su culto fue lo suficientemente importante como para que la tradición oral se interesara en rellenar los huecos de la historia transmitida. En este caso se nos dice que era de origen romano, y que era casado al momento de subir al episcopado, por lo que su mujer se retiró a un monasterio en Arlés. A decir verdad esto último no corresponde a las costumbres de la Galia en el siglo IV sino en el VI, por lo que la leyenda en este punto ha recreado el dato histórico. Se dice que su elección estuvo presidida por un milagro: floreció con margaritas un palo seco para indicar al elegido. Durante siglos se veneró en Trois-Châteaux las reliquias del santo, incluyendo el palo del milagro, hasta que en 1535 (por el conde de Lamarche) o 1561 (por los Hugonotes) fueron destruidas. Sin embargo durante mucho tiempo las fiestas patronales incluyeron el ofrecimiento de frutos y flores al santo, colocados junto a una vara seca.
Para la OMS, es posible que Europa se acerque al fin de la pandemia…
“En cuanto la ola de Ómicron se calme, habrá durante algunas semanas y meses una inmunidad global, ya sea gracias a la vacuna o porque la gente se habrá inmunizado por la infección, y también una bajada a causa de la estacionalidad”, dijo el especialista a la agencia AFP.
Sin embargo, Kluge remarcó que Europa no se encuentra en una “era endémica”. “Endémica significa [...] que podemos prever lo que va a ocurrir; este virus ha sorprendido más de una vez. Así que tenemos que ser prudentes”, advirtió.
A principios del mes de enero, Kluge aseguró que antes de marzo más de la mitad de los europeos se contagiarán de coronavirus debido a la expansión de la variante Ómicron.
“Ómicron es altamente transmisible. A este ritmo, el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington prevé que más del 50% de la población de la región se habrá contagiado con la variante Ómicron en las seis u ocho semanas venideras”, informó el director regional de la OMS.
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Adolescencia, edad difícil…
* Con frecuencia, en este período, los padres, que han olvidado por completo lo que a ellos mismos les pasó, se sienten desorientados, porque no reconocen ya a sus hijos. Lo primero que ha de hacerse es no asustarse. Se trata de una crisis normal, que pasará con tanta mayor rapidez y facilidad cuanto más los padres se esfuercen en comprenderla.
* El adolescente, que deja de ser un niño, comienza por tener una crisis de emancipación. No quiere formar parte del mundo de los pequeños; no quiere ya ser tratado como un niño; no les gusta que le hagan decir sus lecciones; no quiere que se le mande por la noche a acostar; se molesta por la menor observación, sobre todo si se la hacen delante de hermanos y hermanas más pequeños.
* Este deseo de emancipación es la manifestación de un progreso natural en vías de evolución. Sería en vano y peligroso intentar dominarlo por la fuerza.
* Lo que caracteriza la adolescencia es una transformación fisiológica. Importa, pues, que los padres hayan prevenido a tiempo a sus hijos. Pero en cualquier caso resultará de ello una fragilidad física, una inestabilidad de carácter que es necesario tener en cuenta.
* No hay por qué extrañarse en este período de cambios de humor, arranques no razonados, desigualdad en el trabajo, sucesión imposible de prever de alegría ruidosa y gesto sombrío.
* El adolescente siente la impresión de no ser él mismo. No comprende lo que pasa en él. Siente más o menos confusamente algo en sí más fuerte que él mismo... Pero difícilmente lo afirmará. No aceptará con gusto reproches o reconvenciones, y éstos le producirán, en general, la sensación de ser un incomprendido.
* Los adolescentes intentan, con frecuencia torpemente, afirmar su naciente personalidad oponiéndose a la tradición, al conformismo, al criterio de los adultos. Pocas veces tienen pensamiento propio y reflexivo. La prueba es que varía con mucha facilidad sobre el mismo asunto en algunos días de intervalo. Pero se colocan instintivamente en la oposición de lo que vosotros afirmáis. No saben siempre lo que quieren con precisión. Por lo menos, quieren algo distinto de lo que vosotros queréis, y con frecuencia lo contrario de lo que deseáis. Por otra parte están dotados en esta época de una plasticidad artística y de artesanía que los capacita para interesarse por las actividades más inesperadas, a través de las cuales buscan su orientación y realizan la selección de sus gustos y aptitudes.
* En esta edad, que se llama impropiamente ‘la edad ingrata’, no les es suficiente que los quieran, y -hecho que desconcierta mucho a las madres- hasta los abrazos, los mimos, las manifestaciones de cariño familiar, los encuentran indiferentes, si no son hostiles. Lo que ellos quieren es no sólo ser amados; es amar por sí mismos y elegir sus amistades, naturalmente, fuera de su casa.
* Son capaces, a la vez, de un egoísmo casi cínico para todo lo que concierne al cuadro familiar y de una abnegación espléndida fuera; por los pobres, por un ideal, por un movimiento político o religioso.
* Es la época en que principalmente conviene orientarlos, sin imponérselo nunca, hacia una organización de juventudes. La abnegación con que se entregarán a ella será tal vez lo que mejor podrá ayudarlos a salvar ese período de crisis y a volver a encontrar el equilibrio en las mejores condiciones: dándose es como se equilibrarán.
* Para los jóvenes es la edad de la pasión amorosa; por un profesor, por una profesora. Si el objeto de la pasión es algo bueno y equilibrado, no hay que inquietarse; pasará por sí solo.
* Si la evasión del medio familiar no se orienta hacia una organización juvenil, el adolescente puede desviarse en otros sentido, no sin peligro: el de los sueños, la imaginación; es la edad por excelencia del romanticismo y de lo novelesco.
* No os extrañéis si en esta época vuestro hijo no quiere salir con vosotros. Lo importante -pero este importante es esencia- es que el medio en que busque sus diversiones y descanso sea moralmente sano. Aquí también interviene la elección de la organización juvenil que mejor responda a sus aspiraciones.
* Estos niños grandes son capaces de entusiasmarse por las cosas grandes y bellas, como también por cualquier pequeñez. No se os ocurra burlaros; son muy susceptibles. No intentéis adivinarlos; son muy suspicaces: se repliegan en sí mismos y se cierran más; son muy celosos de su autonomía, de su independencia: su personalidad se yergue. ¡Son muchachos mayores, no chiquillos! Sobre todo, que no les parezca que se los vigila.
* Esta última palabra me trae a la memoria la distinción un poco sutil, pero fundamentada, que se estableció un día entre dos traductores del mismo término griego ‘episkopein’, de donde procede la palabra obispo; una de las traducciones, que siguió literalmente los elementos de la composición del verbo griego, dio ‘vigilar’. El otro invirtió, podría decirse, el orden de los factores y dio ‘velar por’. Se ve enseguida la diferencia. Un padre no vigilará a su hijo ya mayor, tendrá confianza en él; pero velará por él para hacerle aprovechar las ocasiones de demostrar su talento o sus cualidades.
* Dad a vuestros adolescentes ocasión de contribuir activamente en las decisiones comunes relativas a la casa. Será un medio de dominar razonablemente la exagerada tentación de evadirse del hogar familiar.
* La experiencia demuestra que los muchachos cuya opinión se tiene en cuenta en los asuntos del gobierno de la casa, alimenticio, de diversiones, radiofónico, etc., en el seno de la familia, buscan menos que otros ejercitar la libertad fuera.
* Sobre todo, ante las manifestaciones de independencia, de evasión, de oposición, de vuestros hijos y de vuestras hijas adolescentes, no dramaticéis. Nada de escenas, lágrimas o reproches...; menos aún violencias.
* En esta edad más que nunca, saben persuadirlos y procurad no obligarlos.
* Cuando deseéis conseguir alguna cosa de ellos, apelad a los móviles más elevados; no os apoyéis en motivos exclusivamente utilitarios; a pesar de las apariencias, están en la época de los idealismos desinteresados. Es también la edad de la poesía, en la que gusta hacer versos sobre todo y a propósito de todo.
* En términos generales, evitad el burlaros de ellos; mostraos compasivos; más aún; hacedles sentir que los comprendéis. Conservaréis de esta manera ante ellos la autoridad moral, de que tanta necesidad tienen, sin que lo sepan, para ayudarlos a canalizar en buen sentido las fuerzas nuevas y magníficas que los encaminan hacia la edad adulta.
* Tranquilizaos; esos años difíciles pasarán. Si vuestros hijos comprenden que los amáis por sí mismos, que no solamente no queréis impedir que crezcan, sino que deseáis ayudarlos a conseguir una personalidad de hombres o mujeres dignos de tal nombre, vuestros hijos y vuestras hijas conservarán su confianza en vosotros o, pasada la crisis, sentirán y os demostrarán un afecto redoblado. GC
Día litúrgico: Martes IV (C) del tiempo ordinario
Buenos días... 507
domingo, 30 de enero de 2022
Dave Monk - Llorando bajo la lluvia...
Sergey Chekalin - Una de las melodías más bellas y mágicas...
Mientras yo sepa...
Escucha en el silencio...
Ciro y Juan, Santos
Sobre estos santos que, al igual que Cosme y Damián, fueron venerados en Grecia como médicos que no cobraban honorarios, existe abundante literatura. Entre ella, sobresalen tres breves discursos de San Cirilo de Alejandría y un panegírico de San Sofronio, patriarca de Jerusalén (638). En dicho panegírico, se encuentran algunos datos sobre una práctica semejante a la incubación, tan común en los templos de Esculapio. La autoridad de los escritos de San Sofronio, que había sido curado en el santuario de los mártires Ciro y Juan, descansa en parte sobre las citas que se hallan en los documentos del segundo Concilio de Nicea, en 787. San Cirilo narra un hecho interesante: para acabar con los ritos supersticiosos de Isis que sobrevivían todavía en Menuthi de Egipto a principios del siglo V, el mejor medio que encontró San Cirilo fue trasladar a dicha ciudad las reliquias de los santos Ciro y Juan. El gran santuario que fue construido en Menuthi se convirtió en un famoso sitio de peregrinación. El nombre actual de la ciudad es Abukir, célebre por la victoria del almirante Nelson en 1798 y por el desembarco de Sir Ralph Abercrombie en 1801. Abukir es un nombre derivado de Ciro, el primero de nuestros mártires. Por extraño que parezca, en los alrededores de Roma existe la pequeña iglesia de Santa Passera, nombre que también proviene de una transformación del de San Ciro: Abbáciro, Pácero, Passera.