Hay dos razones principales por las cuales la úlcera
péptica puede causar fatiga. Estudios han comprobado que una de las
complicaciones más comunes en las personas que tienen una úlcera
péptica es el sangrado interno. Esto puede ocurrir ya sea
porque la úlcera no está siendo tratada o porque se ha desarrollado sobre
un vaso sanguíneo.
Este sangrado puede ser lento y prolongando, generando
una anemia que puede derivar en un
estado de fatiga constante, entre otros síntomas debilitantes. Pero
también la Helicobacter pylori, la bacteria causante principal de la úlcera
juega un rol importante en el potencial desarrollo de la fatiga.
En ambos casos si no se atiende el problema, esta
forma de fatiga puede convertirse
en crónica.
El síndrome de fatiga crónica (SFC) se define como una
fatiga que se presenta de forma recurrente sin una causa aparente durante al
menos seis meses consecutivos. La infección bacteriana por Helicobacter pylori,
que justamente es la causa principal de la úlcera péptica, es uno de los
disparadores principales de la SFC.
Helicobacter pylori (H. pylori) es una cepa
de bacteria que comúnmente habita en el estómago y en la primera sección del
intestino delgado, el duodeno. Se estima que la mitad de la población mundial tiene
H. pylori ‘viviendo’ en su sistema digestivo.
La infección por H. pylori ocurre cuando la bacteria infecta el estómago. La
mayoría de las personas ni siquiera se entera de esta bacteria porque nunca se
enferma. Sin embargo, si la persona presenta signos de úlcera péptica, se
realizará la prueba para detectar esta bacteria.
La bacteria H. pylori contribuye a la fatiga al alterar
significativamente la capacidad de extraer nutrientes de los alimentos.
El nivel bajo de ácido estomacal disminuye la producción
y secreción de enzimas digestivas desde más abajo en el sistema
gastrointestinal, lo que a su vez disminuye la absorción de nutrientes de los
alimentos.
Además, una vez que H. pylori ha establecido su
‘hogar’ en el revestimiento del estómago, roba de manera muy inteligente
nutrientes como el hierro.
La anemia por deficiencia de hierro es una afección
frecuente, y un factor común que contribuye a la fatiga, la intolerancia al
ejercicio, la dificultad para respirar y la aparición de moretones con facilidad.
En las mujeres que menstrúan, la anemia por deficiencia de hierro también puede
contribuir a un flujo menstrual más abundante.
Es muy importante tener una cita con el médico para
trabajar en un plan para prevenir o eventualmente tratar la úlcera péptica. HD
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