La Administración de Drogas y Alimentos (FDA) ha
aprobado una vacuna actualizada contra Covid para todas las personas de 6 meses
en adelante, lo que renueva un dilema ahora anual: ¿Recibir la vacuna ahora,
con el último brote de Covid por todo el país, o reservarla para la ola
invernal?
La nueva vacuna debería proporcionar cierta protección
a todos. Pero muchas personas saludables que ya han sido vacunadas o tienen
inmunidad porque han estado expuestas al Covid varias veces pueden querer
esperar unos meses.
El Covid se ha vuelto común. Para algunos, es una
enfermedad leve con pocos síntomas. Otros están postrados con fiebre, tos y
fatiga durante días o semanas. Un grupo mucho más pequeño, compuesto
principalmente por personas mayores o con enfermedades crónicas, sufre
hospitalización o muerte.
Es importante que aquellos en grupos de alto riesgo se
vacunen, pero la protección de la vacuna disminuye después de unos meses. Los
que se apresuren a recibir la nueva vacuna pueden ser más propensos a
enfermarse este invierno cuando llegue la próxima ola, dijo William Schaffner,
profesor de enfermedades infecciosas en la Escuela de Medicina de la
Universidad de Vanderbilt y vocero de la Fundación Nacional para Enfermedades
Infecciosas.
Por otro lado, para finales del otoño, las principales
variantes pueden haber cambiado, lo que podría hacer que la vacuna sea menos
efectiva, dijo Peter Marks, el principal funcionario de vacunas de la FDA, en
una conferencia el 23 de agosto. Instó a todos los elegibles a vacunarse,
señalando que el riesgo de Covid prolongado es mayor en los no vacunados o los
que no tienen todas sus vacunas.
Si el lanzamiento de la vacuna contra Covid del año
pasado sirve de guía, pocos estadounidenses seguirán su consejo, a pesar de que
el aumento de casos de este verano ha sido inusualmente intenso, con niveles
del virus en aguas residuales que sugieren que las infecciones son tan
extendidas como en invierno.
Ahora, los Centros para el Control y Prevención de
Enfermedades (CDC) observan las aguas residuales, ya que menos personas están
informando los resultados de las pruebas a las autoridades de salud. Los datos
de las aguas residuales muestran que la epidemia es peor en los estados del
oeste y sur del país. En Nueva York, por ejemplo, los niveles se consideran
‘altos’, en comparación con ‘muy altos’ en Georgia.
Las hospitalizaciones y muertes debido a Covid también
han aumentado. Pero a diferencia de las infecciones, estas tasas no se acercan
a las vistas en las oleadas invernales, o en veranos anteriores. Más de 2.000
personas murieron a causa de Covid en julio, una cifra alta pero una pequeña
fracción de las al menos 25.700 muertes que hubo en julio de 2020.
La inmunidad parcial acumulada a través de vacunas e infecciones previas merece
crédito por este alivio. Un nuevo estudio sugiere que las variantes actuales
pueden ser menos virulentas; en el estudio, una de las variantes recientes no
mató a ratones expuestos, a diferencia de la mayoría de las variantes
anteriores de Covid.
Funcionarios de salud pública indican que, incluso con
más casos este verano, la gente parece estar manejando su enfermedad en casa.
“Vimos un pequeño aumento en el número de casos, pero no tuvo un impacto
significativo en términos de hospitalizaciones y visitas a las salas de
emergencias”, dijo Manisha Juthani, comisionada de salud pública de
Connecticut, en una conferencia de prensa el 21 de agosto.
A diferencia de la influenza o los virus tradicionales
del resfriado, Covid parece prosperar fuera de los meses fríos, cuando se cree
que los niños escolares, el aire seco y las actividades en interiores facilitan
la propagación de virus transmitidos por el aire y la saliva. Nadie está
exactamente seguro de por qué.
“El Covid sigue siendo muy transmisible, muy nuevo, y
la gente se congrega en habitaciones con aire acondicionado durante el verano”,
dijo John Moore, virólogo y profesor en el Colegio de Medicina Weill Cornell de
la Universidad Cornell.
O “tal vez el Covid sea más tolerante a la humedad u
otras condiciones ambientales en el verano”, dijo Caitlin Rivers, epidemióloga
de la Universidad Johns Hopkins.
Dado que los virus evolucionan a medida que infectan a
las personas, los CDC han recomendado vacunas actualizadas contra Covid cada
año. El refuerzo del otoño pasado fue diseñado para dirigirse a la variante Ómicron
que circulaba en 2023. Este año, las vacunas de ARNm de Moderna y Pfizer, y la
vacuna a base de proteínas de Novavax —que aún no ha sido aprobada por la FDA—,
están dirigidas a una variante más reciente de Ómicron: JN.1.
La FDA determinó que las vacunas de ARNm protegían
fuertemente a las personas contra enfermedades graves y la muerte, y lo harían
aunque las primeras variantes de JN.1 ahora fueran superadas por otras.
El interés público en las vacunas contra Covid ha
disminuido, con solo 1 de cada 5 adultos vacunándose desde septiembre pasado,
en comparación con alrededor del 80% que recibió la primera dosis. Los
neoyorquinos han estado ligeramente por encima de la tasa nacional de
vacunación, mientras que en Georgia solo alrededor del 17% recibió la última
vacuna.
La aceptación de la vacuna es menor en los estados
donde la mayoría votó por Donald Trump en 2020 y entre aquellos que tienen
menos dinero y educación, menos acceso a atención médica o menos tiempo libre
del trabajo. Estos grupos también tienen más probabilidades de ser
hospitalizados o morir por la enfermedad, según un estudio de 2023 publicado en
The Lancet.
Aunque las vacunas recién formuladas atacan mejor a
las variantes del Covid que circulan, los estadounidenses que no tienen seguro,
o con cobertura insuficiente pueden tener que apresurarse si esperan obtener
una de forma gratuita. Un programa de los CDC que proporcionó refuerzos a 1.5
millones de personas durante el último año, se quedó sin dinero y terminará el
31 de agosto.
La agencia reunió $62 millones en fondos no utilizados
para pagar a los departamentos de salud, estatales y locales, para que ofrezcan
las nuevas vacunas a aquellos que no están cubiertos por un seguro. Pero “eso
puede no alcanzar mucho” si la vacuna cuesta a la agencia alrededor de $86 por
dosis, como el año pasado, dijo Kelly Moore, CEO de Immunize.org, que aboga por
la vacunación.
Las personas que pagan de su bolsillo en las farmacias
enfrentan precios más altos: CVS planea vender la vacuna actualizada por
$201.99, dijo Amy Thibault, vocera de la compañía.
“El precio puede ser una barrera, el acceso puede ser
una barrera” para la vacunación, dijo David Scales, profesor asistente de
medicina en el Colegio de Medicina Weill Cornell.
Sin un programa de acceso que proporcione vacunas a
adultos no asegurados, “veremos disparidades en los resultados de salud y
brotes desproporcionados entre los trabajadores pobres, que no pueden
permitirse faltar al trabajo”, dijo Kelly Moore.
El estado de Nueva York tiene alrededor de $1 millón
para llenar los vacíos cuando termine el programa de los CDC, dijo Danielle De
Souza, portavoz del Departamento de Salud estatal. Con eso se comprarán
alrededor de 12.500 dosis para adultos sin cobertura y con seguro insuficiente,
dijo. En el estado, hay aproximadamente un millón de personas sin seguro.
El año pasado, expertos de los CDC y la FDA decidieron
promover la vacunación anual contra Covid y la influenza en otoño junto con una
vacuna única contra el virus respiratorio sincitial para algunos grupos.
Sería poco práctico que los fabricantes cambiaran la
receta de la vacuna contra Covid dos veces al año, y ofrecer las tres vacunas
durante una o dos visitas al médico parece ser la mejor manera de aumentar su
aceptación, dijo Schaffner, quien es consultor para el Comité Asesor de
Prácticas de Inmunización, que establece las políticas de los CDC.
En su próxima reunión, en octubre, el comité
probablemente instará a las personas vulnerables a recibir una segunda dosis de
la misma vacuna contra Covid en la primavera, para protegerse contra la próxima
ola de verano, dijo.
Si perteneces a una población vulnerable y estás
esperando para vacunarte hasta más cerca de la temporada navideña, Schaffner
dijo que tiene sentido usar máscara y evitar grandes multitudes, y hacerse una
prueba si crees que tienes Covid. Si el resultado es positivo, las personas en
estos grupos deben buscar atención médica ya que la píldora antiviral Paxlovid
podría mejorar sus síntomas y mantenerlas fuera del hospital.
En cuanto a otras personas conscientes, que sienten
que pueden estar enfermos y no quieren propagar el virus, el mejor consejo es
hacerse una prueba única y, si el resultado es positivo, intentar aislarse
durante unos días y luego usar máscara durante varios días mientras evitan
habitaciones concurridas. Repetir las pruebas después de un resultado positivo
no tiene sentido, ya que las partículas virales en la nariz pueden permanecer
durante días sin indicar un riesgo de infectar a otros, dijo Schaffner.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS)
está ofreciendo cuatro pruebas gratuitas de Covid a cualquier persona que las
solicite a partir de finales de septiembre a través de covidtest.gov, dijo Dawn
O’Connell, secretaria adjunta de preparación y respuesta, en la conferencia del
23 de agosto.
El gobierno está centrando su campaña de promoción de
vacunas para el otoño, que está llamando “Arriesga menos, vive más”, en las
personas mayores y los residentes de hogares de adultos mayores, dijo Jeff
Nesbit, vocero del HHS.
No todos pueden necesitar realmente un refuerzo de Covid
en otoño, pero “no está mal darle opciones a las personas”, dijo John Moore.
“El atleta de 20 años tiene menos riesgo que la persona de 70 años con
sobrepeso. Es tan simple como eso”. HD
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