Aproximadamente el 40% de 600 personas con enfermedades como cáncer y artritis, cuyos tratamientos pueden interferir con la inmunidad, tuvieron respuestas insuficientes a los regímenes estándar de vacunación, según el estudio publicado el martes por la revista médica The Lancet.
Varios países, incluido Estados Unidos, han comenzado a implementar terceras dosis para personas con sistemas inmunológicos debilitados por enfermedades o terapias para combatirlas. La semana pasada, EEUU también dio a conocer planes para administrar dosis adicionales a personas que ya han completado su esquema de vacunación, una moción a la que se oponen algunos grupos humanitarios y de salud global, incluida la OMS, que alude a la falta de suministros en muchos países pobres.
Algunos médicos y observadores se han referido a una falta de evidencia de que dosis adicionales aumenten significativamente la protección. Pero los reguladores estadounidenses ya aprobaron una tercera dosis para personas con sistemas inmunológicos gravemente comprometidos.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU y asesores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) están evaluando ahora la seguridad y eficacia de una tercera dosis para la población general. El Comité Asesor sobre Prácticas de Vacunación de los CDC programó una reunión de dos días que comenzará el lunes y en la que se discutirá sobre las dosis de refuerzo.
Los hallazgos del estudio del Reino Unido, denominado Octave, no brindan respuestas sólidas sobre la eficacia de las vacunas contra el Covid en la protección de pacientes inmunodeprimidos, dijeron los autores. “No existe un límite clínico acordado para medir la respuesta a la vacunación contra el Covid-19”, señalaron.
Sin embargo, los resultados indican que incluso una protección parcial contra el Covid-19 “podría ser clínicamente beneficiosa”, indicó Iain McInnes, director de la Facultad de Ciencias Médicas, Veterinarias y de la Vida de la Universidad de Glasgow y líder del estudio.
El análisis, realizado por investigadores provenientes de varias universidades del Reino Unido, evaluó una serie de grupos de pacientes en cuanto a sus respuestas a los regímenes estándar de vacunación. Los pacientes tratados por vasculitis, una inflamación de los vasos sanguíneos, tuvieron el nivel más bajo de respuesta de anticuerpos, según el estudio.
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