En el marco del Día Mundial de la Tuberculosis que
se celebra cada 24 de marzo, llaman a tomar conciencia sobre esta enfermedad.
La tuberculosis es una enfermedad causada por una
bacteria denominada Mycobacterium tuberculosis, que afecta principalmente a los
pulmones, pero también a otras partes del cuerpo como los riñones, los huesos
de la columna vertebral, el sistema nervioso central y prácticamente cualquier
otra parte del cuerpo.
Así lo explicó el Dr. Francisco Abelenda, médico
del Servicio de Clínica Médica del Hospital Alemán, quien además indicó que la
infección se transmite de persona a persona a través del aire y comentó: «Se
produce cuando un enfermo de tuberculosis pulmonar tose, estornuda, escupe,
canta y habla. De esta manera, el enfermo expulsa pequeñas gotitas (llamadas
gotitas de Flügge) con los bacilos tuberculosos al aire. La persona que se
encuentra cerca los puede inhalar y quedar infectada. Esta afección se puede
prevenir y también curar, pero de no tratarse puede ser mortal».
Al ser consultado acerca de qué es la tuberculosis,
el especialista dijo: «Esta pregunta le parecería tal vez demasiado simple y
fácil de responder a cualquier persona de los siglos XIX y XX, ya que la
tuberculosis constituía entonces el paradigma de la enfermedad incurable y su
presencia era familiar para todo el mundo».
«Sin embargo, preguntarnos por ella se hace hoy
pertinente debido a que la conducta, la distribución geográfica y el
significado social de esta enfermedad han cambiado radicalmente todos estos
años. Es por ello que debemos seguir pensando en la tuberculosis, evaluar su
genio y sus particularidades», agregó el Dr. Abelenda.
Cuáles son los síntomas de la tuberculosis
«Las personas que se enferman de tuberculosis
tienen síntomas como tos, fiebre, sudores nocturnos y pérdida de peso. No pocas
veces estos síntomas son persistentes pero tolerables y los enfermos pueden
pasar mucho tiempo antes de procurar ayuda médica y mientras tanto seguir
esparciendo los bacilos y con ellos la enfermedad», expresó el profesional.
Asimismo, manifestó que «hay personas que son más
susceptibles a infectarse y otras que, al tener contacto con el bacilo, logran
salir indemnes. Las más predispuestas son aquellas personas cuyo sistema
inmunológico está deteriorado (personas con HIV, desnutridos, fumadores,
diabéticos) y también aquellos que trabajan o viven en lugares donde exista
hacinamiento (viviendas precarias, cárceles, fábricas con espacio deficiente),
todas condiciones que se agravan al empeorar las condiciones socioeconómicas».
El impacto de la tuberculosis en la Argentina
El Dr. Abelenda señaló que «si bien en la Argentina
la tasa de notificación registró un leve descenso con respecto a lo observado
en años anteriores, continúa existiendo una considerable brecha entre las
diferentes jurisdicciones del país, con elevada concentración de casos en
provincias como Salta, Jujuy y Formosa cuyas tasas duplican prácticamente la
media nacional».
«A su vez, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad
de Buenos Aires (CABA) notifican la mitad de los casos de todo el país. Este
panorama de desigual distribución de la enfermedad en nuestro país dibuja por
lo tanto un escenario epidemiológico preocupante, que requiere especial
atención», aseveró el especialista.
Lo que hay que saber sobre el control de la enfermedad
El médico indicó que el ministerio de Salud de la
Nación considera muy importante distribuir entre la población cuatro
informaciones cuyo conocimiento es clave para el control de esta enfermedad:
·
La
tuberculosis tiene cura, sobre todo si su detección es temprana y el
tratamiento es adecuado.
·
Es
fundamental la aplicación de la vacuna BCG al nacer, como única dosis en la
vida, para evitar la aparición de formas graves como meningitis por
tuberculosis. No previene la enfermedad, sino solo las formas graves en los
pacientes más vulnerables como los niños y recién nacidos.
·
Ningún
paciente tratado correctamente contagia. Por ello es muy importante la consulta
temprana y el diagnóstico precoz por el servicio de salud, así como el
cumplimiento total del tratamiento, que dura como mínimo 6 meses (según cada
caso).
·
La
tuberculosis no está erradicada ya que continúa siendo un problema de salud
pública para la Argentina, con una notificación anual que supera los 10.000
casos y cerca de 700 muertes por esta enfermedad (698 casos letales durante el
año 2009). BP
No hay comentarios.:
Publicar un comentario