En el marco del inicio de la Semana de la
Vacunación en las Américas, los doctores Ángela Gentile, Roberto Debbag y
Pablo Bonvehí detallan cuáles son las plataformas vacunales disponibles en
Argentina. Cómo actúan y para quiénes están recomendadas.
La gripe es una enfermedad respiratoria muy
contagiosa provocada por el virus de la influenza. Puede ser leve, pero también
muy grave, especialmente en ciertos grupos de alto riesgo. Se calcula que las
epidemias anuales causan en el mundo de 3 a 5 millones de casos graves y
290.000 a 650.000 muertes.
En el marco de la Semana
de Vacunación en las Américas (SVA) y la Semana
Mundial de Inmunización, iniciativas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que se
desarrollarán del 22 al 29 de abril, con el lema ‘Ponte al día.
CadaVacunaCuenta’, es fundamental tener en cuenta que, debido a que los virus
de la gripe cambian cada año, la forma más efectiva de reducir el riesgo de la
enfermedad es la vacunación anual y oportuna.
La reformulación anual de las vacunas responde a la necesidad de
adaptarse a las cepas del virus de la influenza circulantes. Las vacunas
antigripales pueden ser de 3 (trivalentes) o 4 cepas (tetravalentes) pero
también pueden diferenciarse según su plataforma de producción.
En el caso de las vacunas trivalentes, protegen contra 2 cepas de la
influenza A (H1N1 y H3N2) y un linaje de la influenza B y se encuentran
disponibles de forma gratuita para los grupos de riesgo como parte del
Calendario Nacional de Vacunación.
Las vacunas tetravalentes (o cuadrivalentes), en tanto, protegen contra
dos cepas de virus de la influenza A (H1N1 y H3N2) y dos linajes de la
influenza B y están disponibles en el mercado privado.
Según su tecnología de producción, en Argentina existen dos tipos,
aquellas desarrolladas con la tecnología tradicional de producción en huevo y,
desde el 2022, se cuenta en el mercado privado con una vacuna antigripal
desarrollada con tecnología de cultivo celular.
Todas estas vacunas antigripales se consideran inactivadas, es decir
que, más allá de la plataforma en la que se fabriquen, están formuladas con
fragmentos virales responsables de generar respuesta inmune en el paciente. Son
todas vacunas seguras para la población general, embarazadas e
inmunosuprimidos.
La tecnología tradicional a base de huevos se ha utilizado durante más
de 70 años. Con una amplia experiencia en la producción a gran escala y con
resultados significativos en la salud pública, esta producción requiere de una
gran cantidad de huevos (especialmente desarrollados para tal fin),
planificación y tiempos de producción cercanos a los 6 meses, así como el uso
de antibióticos.
La vacuna adyuvantada disponible en Argentina en el mercado público de
forma gratuita para los adultos mayores de 65 años, también se produce a partir
de la tecnología de huevos. Esta vacuna contiene un adyuvante, que es una
sustancia que potencia la respuesta inmunitaria del organismo a la vacuna.
Resulta importante entonces que los adultos mayores se vacunen con este
tipo de vacunas porque las personas mayores 65 años tienen mayor riesgo de
sufrir complicaciones a causa de la gripe debido a un fenómeno llamado
inmunosenescencia, que es la pérdida de la capacidad de respuesta inmune, no
solo frente a las vacunas, sino también frente a infecciones.
Desde el 2022 se encuentra disponible en Argentina en el mercado privado
la vacuna de cultivo celular, aprobada para su aplicación a partir de los 6
meses de edad. La producción en cultivo celular no requiere huevos de gallina,
los virus inactivados utilizados para hacer la vacuna se replican en cultivos
de células. Los tiempos de la producción se reducen a la mitad en comparación
con los métodos tradicionales.
El COVID-19 nos enseñó cómo trabajar con nuevas tecnologías y esto ha
sido realmente un salto cualitativo importantísimo en vacunación.
La tecnología de cultivo celular evita la ‘adaptación al huevo’, lo que
genera una coincidencia más fiel entre las cepas contenidas en la vacuna y las
definidas por la OMS como circulantes ese año.
Con esta tecnología la similitud antigénica entre las cepas circulantes
y las contenidas en la vacuna demostró ser mayor para la influenza A/H3N2 y el
Linaje B Victoria. En el caso de la influenza A/H3N2 la similitud antigénica
fue mayor al 96% versus el 45% de la producida en huevo.
Y lo más importante de estas vacunas es que al ser con una tecnología
que evita el proceso en huevos tenemos muchas menos posibilidades de
mutaciones.
Campaña
de Vacunación Antigripal: quiénes deben vacunarse
Toda persona mayor de 6 meses puede recibir la
vacuna antigripal según criterio de su médico tratante. Es fundamental que las
personas comprendidas en los grupos de riesgo reciban la vacuna antigripal, ya
que de esta manera se garantiza la prevención de una de las enfermedades
respiratorias de mayor impacto individual y sanitario.
La vacuna antigripal se encuentra incluida en el Calendario Nacional de
Vacunación y comprende la población más vulnerable, como son: mayores de 65
años, personal de salud, embarazadas (en cualquier trimestre de la gestación,
para proteger a la madre y al bebe durante sus primeros meses), puérperas hasta
10 días posteriores al parto (sino la recibieron durante el embarazo), niños de
6 a 24 meses y personas entre 2 y 64 años que presenten patologías crónicas
(respiratorias, cardíacas, diabetes, trastorno de la inmunidad, obesidad, entre
otras).
Según datos del Ministerio de Salud, durante el 2022 se registró un
marcado aumento de casos en el país de enfermedad tipo gripe con respecto a
2020/2021 y 2018/2019.
En la pandemia, durante dos años, casi no tuvimos circulación de virus
respiratorios, incluyendo a la influenza. Pero en 2022 tuvimos 3 brotes
epidémicos en la Argentina: uno en el verano, otro en otoño-invierno un poco
menor que el de verano y uno que ha ocurrido en los meses de primavera, es
fundamental vacunarnos cuanto antes. BP
No hay comentarios.:
Publicar un comentario