Obispo, 27 de Mayo
Elogio: En Orange, de
la Provenza, san Eutropio, obispo.
Eutropio,
originario de Marsella, llevó una vida bastante libre en la juventud. El
matrimonio le hizo entrar en razón y, a la muerte de su esposa, el obispo
Eustaquio le convenció para que recibiese las órdenes sagradas. El cielo
derramó abundantes gracias sobre Eutropio, cuya conversión fue total, según se
dice. El santo se entregó a la oración y al ayuno. Muy pronto fue elegido para
suceder a Justo, el obispo de Orange.
Los visigodos
acababan de asolar aquella diócesis. La ruina material y moral era tan grande, que
Eutropio se sintió tentado a huir de allí, pero un hombre de Dios, con quien
consultó el asunto, le mostró el camino del deber. A partir de ese momento, el
nuevo obispo fue un admirable ejemplo para su grey. Los términos en que habla
de él san Sidonio Apolinar en una carta que ha llegado hasta nosotros, muestran
la fama de piedad y ciencia de que gozaba san Eutropio. Una inscripción
sepulcral califica al santo de «innocentissimus», lo cual significa
probablemente que ejerció sin tacha el cargo de obispo. El nombre de san
Eutropio aparece en el Martirologio Jeronimiano.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario