La administración de los viales a gran escala entre la población va a permitir que se alcance la inmunidad de rebaño, una meta necesaria para dejar atrás la pandemia y recuperar la vida normal. Sin embargo, aunque las vacunas funcionan y son necesarias, también es cierto que pueden generar ciertos efectos secundarios que resultan molestos en las personas inoculadas. Los más comunes son cansancio, malestar general, dolor en el brazo donde se ha puesto la inyección y fiebre.
Un estudio que se ha realizado en Estados Unidos y que se acaba de publicar en la plataforma Jama Network desvela un nuevo síntoma de la vacuna de Moderna a tener en cuenta: el brazo COVID. Los síntomas de este efecto adverso incluyen eritema, prurito, induración y dolor al tocar la zona en la que se ha recibido la vacuna. Se trata de una reacción cutánea retardada, ya que surge una semana después de haberse inoculado la vacuna, aunque tiende a desaparecer pocos días después.
El brazo COVID puede aparecer 7 días después de la primera dosis o 2 días después de la segunda, tal como se ha demostrado en los 16 pacientes con reacciones cutáneas que ha investigado el estudio. La investigación afirma que estas reacciones adversas son benignas y en ningún caso suponen un riesgo para el paciente, aunque sí que pueden generar dolor e hipersensibilidad dérmica. El hallazgo también expone que no se ha encontrado esta reacción en los pacientes vacunados con Pfizer, la otra vacuna de tipo ARN mensajero que se está utilizando actualmente en todo el mundo.
Si bien ha habido informes anteriores de las reacciones que ocurren principalmente con la vacuna de Moderna, su apariencia puede ser aparatosa.
Los informes de sarpullido después de las vacunas, popularmente llamado ‘brazo COVID’, comenzaron a aparecer en un grupo en Facebook de farmacéuticos a principios del 2021. Ellos compartieron sus experiencias en el grupo 'Personal de farmacia para el apoyo de COVID-19', publicando imágenes de grandes círculos rojos en sus brazos. La gente se preguntaba qué sabían los miembros de la comunidad de 44 mil personas sobre esta aparición y si otros vieron efectos similares. Si bien la mayoría de las reacciones se desarrollaron en el hombro y la parte superior del brazo cerca del sitio de la inyección, otras aparecieron en el codo y los dedos y la palma de la mano, según el estudio. En algunos casos, el tejido debajo de la superficie de la piel se endureció y perdió su apariencia suave en respuesta a la inflamación.
Otros efectos secundarios de la vacuna de Moderna
Los más frecuentes son el dolor, enrojecimiento e hinchazón en el brazo donde se aplicó la vacuna, además de cansancio, dolor muscular, dolor de cabeza, escalofríos, fiebre y náuseas. De acuerdo a la información de los Centros de Control de Enfermedades (CDC, por sus iniciales en inglés) de Estados Unidos, estos efectos secundarios suelen aparecer al cabo de uno o dos días después de aplicarse la vacuna.
Es importante tener en cuenta que cualquiera de los efectos secundarios de los que se habla, tanto en esta como en otras vacunas, debe desaparecer en pocos días.
¿Qué se sabe sobre la seguridad de la vacuna de Moderna?
En los ensayos clínicos, los síntomas de reactogenicidad (efectos secundarios que aparecen dentro de los 7 días después de vacunarse) eran comunes, pero principalmente fueron de leves a moderados. Los efectos secundarios (como fiebre, escalofríos, cansancio y dolor de cabeza) en todo el cuerpo fueron más comunes después de recibir la segunda dosis de la vacuna. La mayoría de los efectos secundarios fueron de leves a moderados. No obstante, una pequeña cantidad de personas presentó efectos secundarios graves que afectaron su capacidad para realizar sus actividades diarias. P
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