“Los niños,
especialmente los menores de 2 años, conforman junto con los adultos mayores y
la personas con factores de riesgo, los grupos de riesgo más vulnerables y los
que más pueden verse afectados por las complicaciones de la gripe o influenza”.
Así lo manifestaron especialistas de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP),
acompañando el inicio del otoño, período en el que se recomienda comenzar con
la vacunación antigripal.
La gripe o influenza
es una enfermedad viral respiratoria muy contagiosa. Por lo general, la mayoría
de los que la padecen se recupera en una o dos semanas sin necesidad de
tratamiento médico específico. Pero en niños pequeños y en otros grupos de riesgo,
puede producir complicaciones, hospitalizaciones, secuelas y hasta la
muerte, por lo cual es necesario que reciban la vacuna para protegerse.
“Todos los niños de
6 a 24 meses deben recibir 2 dosis de la vacuna antigripal (separadas por al
menos 1 mes) con excepción solo de aquellos ya vacunados el año anterior, a
quienes se les aplicará una sola dosis; esto no tiene ningún costo, ya que la
inmunización en este grupo etario está prevista en el Calendario Nacional
(gratuito y obligatorio). No se requiere orden médica, ni receta; con solo
acercarse al centro de salud u hospital público más cercano (preferentemente
concurrir con libreta sanitaria o carné de vacunas) se debe acceder a la
vacunación sin problemas”, sostuvo la Dra. Elizabeth Bogdanowicz, infectóloga
pediatra, Secretaria del Comité de Infectología Pediátrica de la Sociedad
Argentina de Pediatría.
Sin embargo, si bien
se carece de estadísticas específicas sobre los niveles de vacunación, los
especialistas de la SAP estimaron que “como la inclusión de la vacuna en el
Calendario para este grupo etario es relativamente nueva, todavía hay gente que
lo desconoce y muchos niños de entre 6 a 24 meses no son vacunados o reciben
solo 1 de las 2 dosis indicadas, quedando desprotegidos, lo que además propicia
un incremento de la circulación del virus”.
Con respecto a las
embarazadas, la SAP recuerda que la recomendación es vacunarse en cualquier
momento durante la gestación y en el caso de las puérperas (que han parido
recientemente y que no hubiesen recibido la vacuna durante el embarazo), se
aconseja recibir la inmunización preferentemente al egresar de la maternidad y
cómo máximo durante los 10 días posteriores al nacimiento.
En el caso de los
mayores de 2 años, la vacuna está incluida en el Calendario Nacional para
aquellos que presenten enfermedades asociadas que hagan que las complicaciones
de la gripe pongan en riesgo su salud, como por ejemplo quienes tengan
enfermedades respiratorias, cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o
adquiridas, pacientes oncohematológicos y trasplantados, entre otros.
Estos niños están
contemplados y deben recibir la vacunación (1 o 2 dosis, dependiendo la edad y
si fueron vacunados anteriormente) en forma gratuita, pero se les va a requerir
la orden médica que compruebe su condición de riesgo. Mientras que los menores
de 24 meses sanos que hubiesen sido vacunados durante el año pasado, deben
recibir una sola dosis y no necesitan prescripción médica.
La vacuna antigripal
se puede administrar sola o conjuntamente con otras vacunas y la protección se
alcanza entre las 2 y 3 semanas posteriores a la aplicación. De hecho los
especialistas de la SAP aconsejan no perder la oportunidad de dar otras vacunas
importantes e incluidas también en el calendario nacional de inmunizaciones,
como por ejemplo la vacuna contra el neumococo, para la prevención de
enfermedades neumocócicas como la meningitis y la neumonía, y su indicación son
3 dosis a los 2, 4 y 12 meses de edad.
En cuanto a las
contraindicaciones de la vacuna, solo alcanza a aquellas personas alérgicas al
huevo, una condición muy poco frecuente. Y como reacciones adversas solo se
registra dolor en el lugar de la aplicación, y en algunos casos algunas líneas
de fiebre en las horas posteriores, cuadro que revierte espontáneamente. De no
hacerlo, se debe consultar al pediatra porque es posible que se esté en
presencia de alguna condición médica que nada tenga que ver con la
vacuna.
“Si bien desde la
SAP como sociedad médica nos sentimos en la obligación de recordar las indicaciones
precisas de la vacunación antigripal, la recomendación prioritaria e
irremplazable siempre es la consulta con su pediatra de confianza, que es quien
sabrá orientar a la familia analizando las situaciones individuales y la
condición del grupo en su conjunto”, aclaró la Dra. Gisela Martinchuk, médica
pediatra, Secretaria del Comité de Neumonología de la SAP.
A continuación, se
detallan los diferentes grupos de riesgo y la condición (gratuita y obligatoria
o recomendable) de la vacunación:
- Niños de 6 a 24 meses - Gratuita y obligatoria - (2
dosis, separadas de 1 mes) - Prescripción
médica NO
- Niños de hasta 24 meses (ya vacunados en 2017) -
Gratuita y obligatoria (1 dosis) - Prescripción médica NO
- Niños de 25 a 35 meses con factores de riesgo -
Gratuita y obligatoria (1 o 2 dosis) (*) Prescripción médica SÍ
- Niños de 36 meses a 8 años (inclusive) con factores
de riesgo - Gratuita y obligatoria (1 o 2 dosis) (*) - Prescripción médica
SÍ
- Mayores de 65 años - Gratuita y obligatoria - Prescripción
médica NO
- Embarazadas en cualquier mes de gestación -
Gratuita y obligatoria -
Prescripción médica NO
- Puérperas (hasta los 10 días posteriores) -
Gratuita y obligatoria - Prescripción médica NO
- Personas de 9 a 64 años con factores de riesgo -
Gratuita y obligatoria - Prescripción médica SÍ
- Personal de Salud - Gratuita y obligatoria - Prescripción médica
NO
- Convivientes con enfermos oncohematológicos -
Recomendable - Prescripción médica SÍ
- Convivientes con prematuros nacidos con menos de
1.500 g - Recomendable - Prescripción médica SÍ
(*)Aquellos que hubiesen recibido 2
dosis anteriormente, deberán aplicarse una sola dosis
Principales síntomas de la gripe
- Fiebre alta (generalmente 39° o más)
- Dolor de cabeza y dolor corporal generalizado
- Cansancio, decaimiento
- Tos / Dolor de garganta
- Secreción o congestión nasal
- Diarrea y vómitos
(Estos síntomas
pueden presentarse aislados o en conjunto)
Recomendaciones para evitar el contagio y la circulación
del virus
- Evitar exponer al niño cerca de personas
enfermas.
- Si ya se contagió, apartarlo para proteger a
los otros niños y a los adultos mayores.
- Lavarle las manos con agua y jabón
frecuentemente
- Usar alcohol en gel
- Taparle la boca y la nariz con una bufanda o
pañuelo o cubriendo el cochecito cuando sale a la calle
- No llevarlo a lugares con mucha circulación de
gente.
- No enviar al niño a la guardería en los
primeros meses de vida, de ser posible. En el caso que concurra, no deberá
asistir mientras dura la enfermedad
- Ventilar los ambientes para evitar el
hacinamiento
- Evitar el humo, en especial del tabaco, que
aumenta la posibilidad de enfermar.
- Mantener la lactancia materna en forma
prolongada.
- Tener el calendario de vacunación completo.
- No compartir juguetes, pañuelos, toallas,
vasos, cubiertos.
- No exponer al niño a cambios bruscos de
temperatura.
- No automedicar al niño.
- Consultar al pediatra ante el menor síntoma.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario