sábado, 28 de noviembre de 2020

Cómo sobrevivir mentalmente al 2020…

Las personas pasan por años difíciles de acuerdo a situaciones particulares. Pero 2020 es un año complicado de sobrellevar para todo el mundo. Prácticamente nadie es ajeno a los efectos de la pandemia de coronavirus, que además de ser una tragedia sanitaria (con casi 60 millones de casos y más de 1,4 millones de muertes), hundió a la economía global y provocó severos problemas a la economía doméstica de muchas familias. Todo ese combo impacta en la salud mental y física.

“Las situaciones estresantes afectan de muchas maneras, sobre todo cuando simultáneamente ocurren varias”, sostiene Megan Lambertson, trabajadora social en Salud Conductual del Sistema de Salud de la Clínica Mayo (Estados Unidos), en un artículo de la institución.

Lambertson enumera cuáles son esos cambios que pueden darse en paralelo:

·        Cambios emocionales: Cuando uno está estresado, puede tener muchos sentimientos, entre ellos, ansiedad, miedo, ira, tristeza o frustración, especialmente ante situaciones que no se pueden controlar.

·        Cambios físicos: A veces, las emociones confluyen y producen síntomas físicos que hacen sentirse todavía peor. Por ejemplo, el estrés puede provocar dolores de cabeza, náusea e indigestión, o la persona puede respirar más rápido, sudar más, sentir palpitaciones cardíacas y presentar varios dolores o molestias. Estar bajo mucho estrés durante un período prolongado puede reducir la calidad del sueño, provocar lagunas mentales, y hasta cambios en la alimentación (como ingerir más o menos cantidad que antes). Además, puede haber menos inclinación a hacer ejercicio.

·        Cambios en el comportamiento: La gente suele comportarse de forma diferente cuando está estresada. Por ejemplo, una persona puede retraerse, mostrarse indecisa o irritarse fácilmente; a lo mejor, puede estar irascible o llorar con facilidad. Otros, en cambio, pueden recurrir a hábitos insalubres, como abusar de las drogas o el alcohol, cuando están estresados. El estrés puede hacernos enojar más o ser más agresivos que antes. Uno puede gritar o perder los estribos por cosas pequeñas, lo que, a su vez, afecta la forma de conducir las relaciones personales hasta con familiares y amigos.

Consejos

Dada la excepcionalidad de este 2020, “se podría creer que es imposible hacer o alcanzar un efecto positivo y controlar aunque sea un poco la situación, lo cual puede producir sentimientos de ansiedad, desesperanza e impotencia”, dice la especialista.

·        Moderar el consumo de noticias negativas. “Recibir constantemente noticias negativas afecta mucho al estado de ánimo, sobre todo cuando son noticias que tienden a resaltar el sufrimiento y enfatizar sentimientos de temor o tristeza -añade-. Aunque todos manejamos las situaciones estresantes de forma diferente y la capacidad de lidiar con la negatividad varía, es poco probable que remitirse solamente a noticias negativas sea beneficioso para la salud mental; por eso, recomendamos adoptar un enfoque moderado. Es decir, buscar noticias positivas o descansar completamente por un tiempo de las noticias y de los medios de comunicación”.

·        Mantener distancia física (y cuidados), pero no emocional con el entorno. “En mi práctica, observé que algunos pacientes dejaron de visitar familiares, conocer a nuevos parientes o reunirse con amigos. Estas situaciones estresantes dan una sensación de aislamiento que puede llevar a más cambios emocionales y conductuales. Algunas personas que creían gozar de buena salud mental afrontan dificultades diferentes por las restricciones y quienes tienen dificultades mentales en estos momentos no encuentran realmente ayuda ni siquiera en la idea de formular un plan”, sostiene. Y propone reflexionar sobre el comportamiento y las emociones que uno pudo haber cambiado y cómo eso afectó no solamente a la propia vida sino a la de otras personas que también forman parte de ella.

·        Hacer ejercicio todos los días.  Ejercitarse regularmente produce de forma natural hormonas que alivian el estrés, además de mejorar la salud mental y física en general. Se puede hacer ejercicio de varias formas: caminar, usar escaleras siempre que sea posible, correr o ir en bicicleta hasta el destino deseado en vez de usar el auto o el transporte público. Incluso, quienes deseen continuar con el aislamiento, pueden optar por clases virtuales de gimnasia, lo que ayuda a comprometerse con un horario y tener interacción social sin exponerse al riesgo de contagio.

·        Dormir suficiente. Las personas adultas generalmente necesitan entre 7 y 9 horas de sueño. Una siesta corta, de hasta 30 minutos, ayuda a estar alerta para lo que resta del día. A fin de que el sueño nocturno sea más significativo, hay que practicar una buena higiene del sueño, o sea, evitar las pantallas (teléfono, computadora, tablet, televisión) antes de acostarse.

·        Practicar ejercicios de relajación. La respiración profunda, la meditación y la relajación progresiva de los músculos son maneras rápidas y fáciles de reducir el estrés. Empiece con nuestras sugerencias para meditación con atención plena o pida al médico que le dé recomendaciones.

·        Autoevaluarse y buscar ayuda profesional (si es necesario)El cómo se siente uno, día tras día y cómo se manejan los eventos estresantes es algo muy personal, dice Lambertson y sugiere entrar en contacto con uno mismo por lo menos una vez por semana para evaluar la salud mental y física. Estas preguntas pueden ayudar: ¿Se comunicó con sus seres queridos o se enfocó en cuidar de sí mismo? ¿Siente ansiedad, temor o depresión la mayor parte de los días? ¿Siente que no puede controlar su vida?

En caso de detectar que los efectos producidos por el estrés dificulten a la persona funcionar como antes o de manera que pueda sentirse bien consigo misma, recomienda consultar al médico.

“Este es un momento difícil para muchos y, quizás, sienta el estrés de los eventos que suceden a nivel mundial y local. Hablar con el médico de cabecera o con un profesional de la salud respecto a cómo manejar y reaccionar mejor debería ser algo tan aceptado y común como lo es buscar atención médica para dolores y molestias”, concluyó.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario