2020 puede terminar con una nota positiva, después de
toda la tristeza y la ruina a la que hemos estado sujetos durante los últimos
meses. En un esfuerzo por frustrar el furor del coronavirus, hace unos meses se
inició el trabajo en muchas vacunas experimentales en todo el mundo para
proteger a las personas contra el COVID-19. Entre ellos, el candidato a vacuna
de AstraZeneca-Oxford, ChAdOx1, se promociona actualmente como el pionero.
Desarrollado por AstraZeneca y la Universidad de Oxford, las rutas de la vacuna
comenzaron a principios de este año y los informes sugieren que podría lanzarse
a principios de 2021. Sin embargo, esa no es la única buena noticia. En la
última actualización, se ha revelado que la vacuna Oxford produce una respuesta
inmune tanto en adultos mayores como en jóvenes. Los desarrolladores también
dijeron que la vacuna desencadena respuestas adversas más bajas entre los
ancianos.
“Es alentador ver que las respuestas de
inmunogenicidad fueron similares entre los adultos mayores y los jóvenes y que
la reactogenicidad fue menor en los adultos mayores, donde la gravedad de la
enfermedad COVID-19 es mayor”, dijo un portavoz de AstraZeneca. “Los resultados
fortalecen aún más el cuerpo de evidencia de la seguridad e inmunogenicidad de
AZD1222 (el nombre técnico de la vacuna)”.
La respuesta
inmune segura de la vacuna Oxford es una buena noticia para los ancianos
Una vacuna eficaz se considera un cambio de juego en
la guerra contra el coronavirus, que ya ha afectado a millones de personas en
todo el mundo y ha destrozado la economía mundial. La noticia de que la vacuna
Oxford/AstraZeneca produce una respuesta inmunitaria entre los ancianos es
extremadamente alentadora, ya que se sabe que el virus afecta gravemente a las
personas mayores. El sistema inmunológico se debilita con la edad y también lo
hace la capacidad del cuerpo para combatir cualquier virus. Por lo tanto, los
ancianos han estado en mayor riesgo por el coronavirus mortal. Si la vacuna
realmente funciona, podría darle al mundo un respiro y darnos la oportunidad de
volver a algo de normalidad. Más importante aún, mantendrá a nuestros mayores a
salvo. Si bien la vacuna no está completamente lista, se espera que se
implemente principalmente en la primera mitad de 2021. Los datos de los primeros
ensayos que muestran los efectos positivos de la vacuna aún no se han
publicado, pero se están enviando a una revista revisada por pares. Además,
AstraZeneca confirmó que los hallazgos básicos de la vacuna se han compartido
en una reunión académica cerrada. Los datos de los ensayos también han
demostrado que se informaron menos efectos secundarios en los voluntarios
mayores. Conocida por los científicos como ‘reactogenicidad’, la noticia de un
número menor de estos efectos secundarios entre las personas mayores es otro
signo positivo, ya que esperamos recibir la vacuna en un futuro próximo.
¿Cuál es el
estado de otros candidatos a vacuna COVID-19?
Si bien la noticia de la respuesta inmune segura de la
vacuna Oxford/AstraZeneca es realmente alentadora, todavía tendremos que
esperar y ver cómo se desarrollan las cosas en los próximos meses. El
desarrollo de una vacuna eficaz implica un procedimiento complicado y aún
pueden salir mal muchas cosas. Muchos expertos dudan de que las primeras
vacunas sean totalmente protectoras. Sienten que estas vacunas pueden reducir
la intensidad de la enfermedad pero no durar y que las personas necesitarían la
ayuda de refuerzos. Dicho esto, todavía hay esperanzas, ya que, aparte de la
vacuna de Oxford, también se están llevando a cabo ensayos de vacunas contra el
coronavirus en muchos otros países. La importante farmacéutica estadounidense
Pfizer está desarrollando una vacuna contra el coronavirus junto con BioNTech y
se encuentra en la tercera etapa de sus ensayos en este momento. La candidata a
vacuna experimental contra el coronavirus que está desarrollando CanSino
Biological Inc. y el Instituto de Biotecnología de Beijing fue la primera en el
mundo en obtener el visto bueno para uso militar y también se encuentra en la
tercera etapa de su camino. La posible vacuna rusa COVID-19, Sputnik V, también
se encuentra en fase de ensayos tres, pero las autoridades ya están probando el
virus en más de 40.000 personas. Además, la unidad Janssen de Johnson and
Johnson ha comenzado a trabajar en la fase tres de los ensayos clínicos de su
vacuna contra el coronavirus, mientras que la empresa estadounidense de
biotecnología Moderna ha completado la inscripción de la fase tres de su vacuna
COVID-19. Todos estos son signos positivos y hay buenas razones para creer que
para la primera mitad de 2021 debería estar lista alguna vacuna potente contra
el nuevo coronavirus. Esperamos que las cosas vayan bien en este sentido en los
próximos meses y que el mundo obtenga algo de alivio contra el coronavirus
devastador que tan desesperadamente necesita. JQR
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