¿Sabía que hasta cinco millones de estadounidenses,
de 65 años o más, pueden tener la enfermedad de Alzheimer? Se espera que este
número se duplique cada intervalo de cinco años después de los 65 años, según
una estadística del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes
Cerebrovasculares.
Si bien la enfermedad de Alzheimer es la forma más
común de demencia, no es la única. Los factores de riesgo para todo tipo de
demencia incluyen la edad, el consumo de alcohol, el tabaquismo, la
aterosclerosis, la diabetes, la hipertensión y la genética. Además, los
investigadores han encontrado algunos otros factores sorprendentes que pueden
aumentar su riesgo. En un estudio reciente publicado en JAMA Neurology,
encontró una correlación entre las ayudas para el sueño de venta libre y el
deterioro cognitivo. A continuación se presentan tres factores de riesgo
esenciales:
1. Medicamentos anticolinérgicos
De acuerdo con un estudio reciente publicado en
JAMA Neurology, se encontró que una clase de medicamentos llamados
anticolinérgicos se asocia con una cognición más deficiente y cambios en la
estructura y función del cerebro. Hay algunos que nunca esperaría, como los
medicamentos para el sueño de venta libre, medicamentos sedantes para la
alergia como Benadryl, medicamentos para el dolor como Tylenol PM y
medicamentos recetados como algunos antidepresivos y tratamientos para la
incontinencia urinaria.
La autora principal, Shannon Risacher, profesora de
radiología y ciencias de imágenes en la Escuela de Medicina de la Universidad
de Indiana, dice: “No observamos la cantidad que tomó cada participante del
estudio; Sólo que se los llevaron. Sin embargo, sí vimos que el riesgo
aumentaba en la persona que tomó más de un tipo de anticolinérgico”. Se ha
planteado la hipótesis de que estos medicamentos bloquean la capacidad del
neurotransmisor acetilcolina para actuar con los receptores. Además, el estudio
también mostró que una vez que las personas dejaron estos medicamentos, su
riesgo cayó a niveles normales.
Pero, antes de que te preocupes, Risacher señala
que por ahora, han encontrado una correlación entre las drogas y el deterioro
cognitivo, pero no han encontrado con certeza que una causa la otra. “No deje
los medicamentos recetados sin consultar primero con su médico. Estos
medicamentos se usan por razones importantes, todas las cuales deben tratarse
para tener una vida saludable. Pregunte sobre terapias alternativas o pídale a
su médico que controle su función cognitiva”, dice ella.
2. Falta de vitamina D
Los investigadores encontraron que entre los
participantes del estudio, los adultos mayores con niveles de vitamina D en la
sangre que estaban por debajo de 20 ng/ml tenían un mayor riesgo de deterioro
cognitivo en:
Memoria episódica: Memoria de
sucesos autobiográficos pasados.
Memoria semántica: Memoria de
hechos específicos aprendidos o conocimiento general.
Habilidad visuoespacial: La
habilidad de orientar objetos en el espacio que lo rodea usando señales visuales
(esto implica la percepción de profundidad, la habilidad de encontrar el camino
a casa y la lectura, entre otras cosas)
Función ejecutiva: Razonamiento,
resolución de problemas, planificación y seguimiento de instrucciones.
El investigador del estudio Joshua W. Miller,
profesor y director del Departamento de Ciencias de la Nutrición en Rutgers, de
la Universidad Estatal de Nueva Jersey, dice: “No se sabe si los suplementos de
vitamina D reducirán o prevendrán el deterioro cognitivo. Se necesitan ensayos
de control aleatorios para probar esto. Mientras tanto, los adultos mayores con
un estado bajo de vitamina D, en consulta con su médico, deben considerar los
suplementos de vitamina D, que son relativamente seguros, suponiendo que no se
exceda el límite máximo tolerable de 4000 UI por día”.
La vitamina D se encuentra en fuentes naturales como:
·
Pescados grasos (atún, caballa, pez espada y
salmón)
·
Alimentos fortificados con vitamina D, como
productos lácteos, jugo de naranja, leche de soja, yogur y cereales
·
Hígado de res
·
Aceite de hígado de bacalao
·
Queso suizo
·
Yema
3. Medicamentos para la acidez estomacal
Los medicamentos para la acidez estomacal con
inhibidores de la bomba de protones (IBP) se encuentran entre los medicamentos
más utilizados en todo el mundo. En un estudio alemán, se ha descubierto el
posible vínculo entre los adultos mayores entre la demencia y los IBP, como Omeprazol
y Lansoprazol. El estudio concluyó que “la evitación de la medicación IBP puede
prevenir el desarrollo de demencia”.
El profesor y ex presidente del Departamento de
Epidemiología de la Escuela de Graduados de Salud Pública de la Universidad de
Pittsburgh, el Dr. Lewil Kuller, insta a una respuesta mesurada que explique “Este
es un buen estudio, basado en ciencia sólida. Sin embargo, aún no sabemos si la
relación se debe a que los IBP conducen a la demencia, o que las personas que
toman estos medicamentos pueden tener un mayor riesgo de demencia de todos
modos: fumadores, grandes bebedores, obesidad”.
Entonces, ¿qué debe hacer una persona? “Sé
prudente”, dice Kuller. “No debe dejar de tomar estos medicamentos sin hablar
primero con su médico, pero debe tener cuidado de no tomarlos a largo plazo. Si
necesita el medicamento, úselo, pero no lo tome solo para los síntomas leves”.
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