El 24 de septiembre se celebra en
todo el mundo el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Tiroides con el objetivo de conocer más
sobre esta enfermedad que en la Argentina genera 3.482 nuevos casos cada año,
el 86% de ellos en mujeres, y que suele presentar evoluciones favorables aunque
cada vez haya más casos, según reportan especialistas de todo el país.
En Córdoba, el último relevamiento
oficial fue en 2017 y retrataba la situación entre 2003 y 2013, período en el
que tuvo una incidencia de entre 7 y 8 casos nuevos de cáncer de tiroides por
cada 100.000 habitantes en la provincia, dijo a Télam la presidenta de la
Sociedad de Endocrinología y Metabolismo de Córdoba (Semco), Patricia Dogliani.
No obstante, estimó que
actualmente se puede inferir que esa cifra se elevó a 10 o 12 personas
afectados por esa patología, y que la incidencia del incremento tienen que ver
con el aumento de la obesidad, de la diabetes y los disruptores hormonales (elementos
tóxicos contaminantes) y precisó que casi el 20% de la población mundial tiene
patología tiroidea, se da con mayor frecuencia en la mujer, mientras que el
cáncer afecta en su mayoría a hombres, con un nivel de fatalidad bajo.
Desde Mendoza, el especialista en
Cirugía Oncológica Martín Codutti informó que la detección de esta patología
sigue la misma tendencia creciente y si bien no se cuentan con datos
estadísticos certeros en cuanto a número, la tendencia creciente en su diagnóstico
es notoria día a día. Sin embargo,
comentó que a pesar del aumento en la incidencia, la mortalidad por esta
patología se mantuvo estable en los últimos 30 años. Los pacientes con carcinoma diferenciado de tiroides
(CDT) habitualmente tienen un buen pronóstico, con una elevada sobrevida a
largo plazo en comparación con otros tipos de tumores, comentó Codutti.
Por su parte, la directora del
Instituto Provincial del Cáncer de Entre Ríos (IPC), Carina Enrique, afirmó a
Télam que no es uno de los cánceres más frecuentes, por lo general, no se
tratan con quimioterapia, salvo casos avanzados, que por suerte son muy pocos. Por último, ya que no hay un estudio que pueda hacerse
en personas sanas, pidió estar bien atentos a si hay antecedentes familiares de
este tipo de cáncer y si la persona se palpa algún nódulo en la parte anterior
del cuello, para hacer una consulta urgente.
Al sur del país, el endocrinólogo
de Chubut Gabriel Gricman, que atiende a pacientes en la zona de Trelew y Puerto
Madryn, explicó a Télam que hoy por hoy con las ecografías es fácilmente
detectable el nódulo tiroideo que facilita la detección precoz, sea del tamaño
que sea el nódulo, porque antes se hacía con el palpado, que era descubierto
cuando ya tenía por lo menos 1 centímetro. El especialista detalló que la mayor incidencia de cáncer de tiroides se
da en mujeres y la gran ventaja que tenemos en los últimos tiempos es que ya
contamos en la zona con cirujanos de cuello que pueden operar acá sin necesidad
de los traslados a Buenos Aires.
La situación en Río Negro es
similar a la del resto del país: la mayoría de las personas afectadas son
mujeres, pero en comparación con otros tipos de tumores la tasa de incidencia
es baja, explicó el integrante especialista del Instituto Multidisciplinario de
Oncología de Viedma, Rubén Kowalyszyn. Destacó que los nódulos tiroideos son muy frecuentes, muchos de ellos
son benignos, pero hay que vigilarlos para poder detectar cuáles son los
tumores para tratarlos adecuadamente y el paciente se cure.
En La Pampa, por su parte, el
carcinoma de tiroides en el sexo femenino ocupa el sexto lugar como sitio
tumoral más frecuente y representa el 3,6% de los tumores malignos, al tiempo
que en el hombre corresponde al 0,6% de los tumores malignos, según los resultados
del Registro Poblacional de Tumores de La Pampa, del quinquenio 2013-2017 que
fueron proporcionados a Télam. En La Pampa existe desde hace varios años la Asociación Pampeana de
Endrocrinología y Metabolismo, que nuclea todos los endocrinólogos de la
provincia.
Desde Santiago del Estero y en
diálogo con esta agencia, Omar Marcelo Abdala, endocrinólogo y presidente de la
Sociedad de Endocrinología local, dijo que el cáncer de tiroides es una
patología no altamente prevalente, ya que es una enfermedad cuya presencia es
del 8% en el país y en nuestra provincia ese índice está por debajo ya que es
de sólo el 5%, los que tienen nódulos en la tiroides que son malignos. No se deben asustar, sino ocuparse y consultar al
médico, quien le pedirá un examen clínico y una ecografía la cual es de gran
valor en la información sobre el tipo de nódulo, que puede ser líquido o
sólido, con bordes regulares o irregulares y en caso de ser sólido tiende a ser
maligno, detalló Abdala.
Por último, en toda la zona precordillerana
donde se encuentra Jujuy, los habitantes tienen menos yodo en el cuerpo que los
que viven al nivel del mar, con lo cual hay una predisposición a contraer la
enfermedad por lo que la OMS hace muchos años recomendó yodar la sal para su
consumo y evitar así el bocio endémico. El 30% de la población tiene la predisposición y la enfermedad la hace
entre el 16 y 17%, señaló la médica endocrinóloga jujeña, Patricia Corro.
La persona predispuesta puede ser porque tiene
anticuerpos que atacan la tiroides y por eso en cualquier momento de la vida
puede nacer la enfermedad, concluyó la especialista.
Buen pronóstico y altas
chances de curación
Si bien se registran cada año
mayor cantidad de casos de cáncer de tiroides, un informe elaborado por la
Asociación Argentina de Cirugía por el día internacional de la lucha contra
esta enfermedad, indica que la mayoría de los pacientes evoluciona
favorablemente.
La tiroides es una glándula
endocrina que segrega hormonas encargadas de regular el metabolismo corporal e,
independientemente de su funcionamiento, en la glándula se pueden formar
distintos tipos de nódulos o tumores, según detalla el documento de la
asociación médica. La mayoría son
benignos mientras que de un 5 a 10% son malignos, lo que se conoce como cáncer
de tiroides, puntualiza el texto.
Según los especialistas, los
factores de riesgo más conocidos son los antecedentes familiares y la
exposición a radiaciones o radioterapia, al tiempo que existen distintos tipos
de cáncer de tiroides; los más frecuentes son los diferenciados (son más del
90% e incluyen las variantes papilar y folicular), mientras que el cáncer
medular y los cánceres indiferenciados o anaplásicos constituyen solo un 5% del
total.
El informe, que contó con la
supervisión del especialista Santiago Zund, médico del Departamento de Cirugía
de Cabeza y Cuello del Instituto de Oncología ‘Ángel H. Roffo’, de la Universidad
de Buenos Aires, señala que la incidencia del cáncer de tiroides ha aumentado
en las últimas décadas a nivel global, y según las últimas estimaciones
realizadas en 2018 por el Observatorio Global de Cáncer de la OMS, la
incidencia en la Argentina fue de 3482 nuevos casos para ambos sexos, ocupando
el décimo lugar entre todos los cánceres.
Por eso, los especialistas señalan
que es importante la prevención: La mayoría de estos cánceres son asintomáticos
y una gran parte de estos casos se descubren por estudios de imágenes
solicitados por otras razones, indican.
Frente al cuadro y en el momento
en que se diagnóstica, suele ser tratado sin problemas y con pronóstico de
bueno a excelente. A excepción de los cánceres de tiroides más agresivos que,
suelen representar a alrededor del 5%, concluyen. BP
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