Cuando se trata del
autocuidado y de la salud, nuestros pies son siempre los últimos de la lista.
Descuidar los pies puede suponer un ahorro de tiempo al principio, pero seguro
que un día se vuelve en contra, normalmente en forma de dolor crónico de pies,
infecciones y olor de pies. Estos problemas no sólo son antiestéticos, sino que
también son muy desagradables e incluso dolorosos. Dale a tus pies un poco de
amor y atención de vez en cuando para mantenerlos sanos. Aquí hay 12 consejos
sencillos que los médicos recomiendan para promover la salud de los pies -
desde los remojos de pies y cosas que puedes hacer tu mismo, hasta la elección
de los calcetines adecuados y todo lo demás.
1. Los errores más comunes de
los calcetines
Nosotros llevamos calcetines
todo el tiempo, pero a menudo no les damos mucha importancia. Esto es un error,
porque los calcetines desempeñan un papel fundamental tanto en la comodidad
como en la prevención de enfermedades. Por ejemplo, los calcetines demasiado
pequeños o demasiado grandes pueden provocar ampollas. Busca tejidos
transpirables y que absorban la humedad, como el algodón 100%. El sudor de los
pies puede provocar ampollas, infecciones por hongos y otros problemas. Cuando
el tiempo es más frío, también es importante mantener los pies calientes y
acolchados. Esto se puede hacer superponiendo calcetines finos y transpirables
con calcetines más cálidos de lana o felpa.
2. ¿Está bien andar siempre
descalzo por la casa?
No hay nada comparable al
alivio de quitarse los zapatos al final de un largo día. Por eso puede resultar
tentador deshacerse de las zapatillas siempre que se esté en casa. Aunque
probablemente no haya problema en caminar descalzo durante un corto periodo de
tiempo, hacerlo durante periodos prolongados puede llevarle a desarrollar dolor
en el talón, heridas por presión, tendones inflamados, fracturas por estrés y
fascitis plantar, una condición que lleva a un estiramiento excesivo,
inflamación y desgarro de la cornisa en la parte inferior de tus pies. Para
evitar problemas en el futuro, usa un par de zapatillas cómodas con un soporte
adecuado para el arco del pie. Ten en cuenta que los ancianos y las personas
con diabetes, mala circulación sanguínea, artritis, problemas autoinmunes o
neuropatía deben llevar siempre un calzado cómodo para evitar complicaciones,
caídas y dolor de pies persistente.
3. Un remedio casero para el
olor de pies
¿Estás cansado de los malos
olores de los pies? No es necesario utilizar tratamientos caros para deshacerse
de los olores de los pies. El mejor y más fácil remedio casero para los pies
malolientes es sumergir los pies en té negro fuerte durante 20-30 minutos unos
días a la semana. Antes de que descartes esta idea como una locura, pruébala.
El ácido tánico presente en el té puede matar las bacterias y encoger temporalmente
los conductos sudoríparos de los pies, lo que garantiza la reducción del sudor
y de cualquier olor desagradable. Así es como se prepara este baño de pies:
hierve 2 bolsas de té en 2 ½ tazas (600 ml) de agua durante 15 minutos. A
continuación, añade 5 tazas más (1,2 litros) de agua fría y utiliza la infusión
como remojo para los pies.
4. ¿Son buenas o malas las
chanclas?
Las chanclas son fáciles de
poner y quitar, y están hechas de materiales duraderos, por lo que son la
opción preferida de muchas personas. Esto es un error. Las chanclas están
hechas para la playa y no para caminar. Si bien es cierto que ponerse este tipo
de calzado durante un corto periodo de tiempo está bien, llevarlas más de 1 a 3
horas al día puede provocar grietas en los talones, ampollas entre los dedos,
fascitis plantar y callosidades. Esto se debe a que las chanclas no se adhieren
bien al pie y carecen de soporte para el talón y el arco. Evita llevar chanclas
siempre que vaya a caminar distancias importantes, especialmente cuando hagas
la compra, trabajes en el jardín, vayas de excursión o realices cualquier otra
actividad deportiva.
5. Una solución rápida para el
olor en los pies
¿Sabías que tus pies tienen
más de 200.000 glándulas sudoríparas? Algunas personas tienen los pies
extremadamente sudorosos, es simplemente su naturaleza. Estas personas pueden
beneficiarse del uso de sprays antitranspirantes en los pies, al igual que los
usamos regularmente en las axilas para mantener alejados los olores. La forma
más sencilla de hacerlo es rociar los zapatos con un antitranspirante. Usar
calcetines que absorban la humedad, y dejar que tus zapatos se sequen
completamente entre cada uso también son grandes maneras de prevenir los olores
desagradables.
6. Compra siempre las
zapatillas de tenis en una tienda de calzado deportivo
Incluso si la única actividad
que realizas es caminar, siempre es mejor comprar calzado deportivo en una
tienda especializada. Un personal bien formado te medirá los pies y encontrará
el calzado que mejor se adapte a tus necesidades. Ten en cuenta que debes
sustituir tus zapatillas de tenis cada 6-12 meses, según el uso que les des, ya
que el calzado deportivo es el que más rápido se afloja y empieza a desarrollar
olores desagradables.
7. Algunos consejos para
ajustar los zapatos
Un par de zapatos que no se
ajustan bien no sólo es incómodo de llevar, sino que también aumenta el riesgo
de sufrir lesiones y dolor de pies crónico. Pero hay otras cosas que hay que
tener en cuenta, además de conseguir un par de zapatos con un soporte adecuado
para el arco del pie. Lo primero y más importante es tener en cuenta la talla
de los zapatos. Aunque los zapatos de piel deben ajustarse al máximo, cuando
elijas un calzado deportivo debe haber espacio suficiente para que quepa el
ancho de un pulgar en la puntera. Además, asegúrate de que ninguno de los dedos
de tus pies esté curvado. Para ello, normalmente debes medir tu talla de zapato
por el dedo más largo, que no es necesariamente el dedo gordo, ya que muchas
personas tienen un segundo dedo más largo.
8. Hay una forma correcta y
otra incorrecta de utilizar la piedra pómez
¿Utilizas una piedra pómez o
una lima para pies? Si es así, puede que cometas el error de moverte de un lado
a otro mientras te frotas los pies. Desgraciadamente, esto no es muy eficaz y
sólo consigue que la piel se vuelva áspera. En lugar de eso, hazlo en una sola
dirección o muévete con movimientos circulares, mojando la lima para pies antes
de usarla. Los expertos afirman que también es mucho mejor utilizar una piedra
pómez o una lima para pies de forma ligera pero frecuente -una vez a la semana,
aproximadamente- en lugar de hacerlo con fuerza una vez al mes. Así mantendrás
tus pies suaves todo el tiempo y evitarás que la piel se dañe por el uso
excesivo. Por último, pero no por ello menos importante, hidrata siempre tus
pies después de usar la lima para pies para mantener la piel suave y flexible.
9. No te afeites antes de
hacerte la pedicura
Esto puede sonar extraño al principio,
pero los podólogos recomiendan no afeitarse justo antes de hacerse la pedicura
en su salón de manicura favorito. Incluso el mejor trabajo de afeitado puede
crear pequeñas muescas en la piel y comprometer la barrera cutánea, lo que hace
mucho más fácil que las bacterias, los hongos y cualquier otro germen dejado
por los clientes anteriores penetren en tu piel y causen una infección.
10. Tus pies pueden
beneficiarse realmente del aceite de coco
El aceite de coco no es una
cura para todo, ya que muchas personas pueden tener acné cuando lo usan en la
cara. Sin embargo, el uso de aceite de coco en los pies es realmente una gran
idea. He aquí por qué. El aceite de coco tiene propiedades antifúngicas
naturales y puede realmente suavizar e hidratar la piel áspera, las cutículas y
las áreas de la piel agrietadas o callosas. Así que usar el aceite de coco como
hidratante para los pies es una obviedad. Como la piel de los pies es mucho más
gruesa y menos sensible que la de la cara y el cuerpo, no tienes que preocuparte
por desarrollar acné.
11. Algunos juanetes no
requieren cirugía
El juanete es una
protuberancia que se forma cuando el hueso o la articulación de la base del
dedo gordo migra fuera de su ubicación inicial. Los juanetes pueden ser leves o
graves, y pueden ser indoloros o estar muy inflamados, hinchados y dolorosos.
La cirugía es la única forma de deshacerse de los juanetes de forma permanente,
pero no todo el mundo necesita pasar por el quirófano si tiene un juanete. Los
podólogos sugieren que sólo aquellas personas a las que les resulte difícil
llevar zapatos, experimenten un dolor de pies importante y noten que la
afección les impide caminar y realizar actividades físicas deberían considerar
la posibilidad de eliminar los juanetes mediante una intervención quirúrgica.
Las personas con casos leves o moderados sin dolor suelen sentirse mucho mejor
simplemente haciendo algunos estiramientos y ejercicios, usando zapatos más
anchos o acolchados y utilizando plantillas ortopédicas.
12. Mejora el aspecto y la
salud de tus pies con cosas que ya tienes en casa
¿Por qué gastar mucho dinero
en exfoliaciones de pies y pedicuras si puedes hacer que tus pies luzcan mucho
mejor y más sanos en casa con un coste mínimo? Este remojo casero para los pies
ayuda a dar brillo a las uñas de los pies, hace que la piel sea más suave e
incluso puede ayudar con los hongos de los pies y las uñas. Para preparar el
remojo para pies, combina 2 tazas (450 ml) de agua tibia, ½ taza (120 ml) de
vinagre y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio común. Sumerge los pies en esta
mezcla durante 20 minutos un par de veces a la semana, ¡y verás las mejoras en
pocas semanas! SF
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