El miedo es una emoción normal que tiene una función muy importante, preparar nuestro cuerpo y nuestra mente para enfrentar un objeto o situación que amenace nuestra integridad. Si todo va bien nos permite sortear las dificultades a las que nos enfrentamos todos los días.
En algunas circunstancias el miedo deja de ser un sistema de alerta que nos ayuda y se convierte en un estado emocional alterado. Si el miedo se torna muy intenso y/o constante, se transforma en miedo patológico. Cuando el miedo se comporta de esta manera podemos llamarlo ansiedad y en el caso más extremo de intensidad, pánico.
Distintos trastornos se caracterizan por tener como síntoma fundamental la ansiedad, son los llamados trastornos de ansiedad, como por ejemplo: la fobia social, las fobias específicas, el trastorno de pánico o el trastorno de ansiedad generalizada.
En uno de estos trastornos de ansiedad, la persona se encuentra constantemente preocupada por los más diversos temas: “me van a despedir del trabajo”, “la economía está mal”, “el mundo es un caos”, “le va a pasar algo malo a mis seres queridos”, “me va a pasar algo malo”, “el futuro es peligroso”.En estas circunstancias, el mundo y la vida es un peligro constante.
La persona que piensa de esta manera se mantiene en un estado de alerta y tensión permanente, no descansa, se queja de síntomas como insomnio, dolores musculares, y fatiga. Estamos hablando del Trastorno de Ansiedad Generalizada.Las causas son muy diversas pero lo más importante es que es una condición que se puede tratar.
Los expertos en Salud Mental recurren a la psicoterapia y la farmacoterapia para tratar estas condiciones. Si te sientes de esta manera y no puedes dejar de estar así a pesar de tus intentos por mejorar, si afecta tu vida y sufres por esto, lo mejor que puedes hacer es buscar la ayuda de un especialista. LR
No hay comentarios.:
Publicar un comentario