Degeneración de la retina

Todos sabemos lo importante que es cuidar nuestros ojos, especialmente en edades avanzadas, cuando el tiempo comienza a afectar el cuerpo y dañar este importante órgano. Por lo tanto, es mejor que conozcas lo más posible sobre la degeneración de la retina, una enfermedad que es particularmente común entre los ancianos que afecta la retina, y si no la diagnostica y comienza a tratarla a tiempo, las consecuencias pueden ser extremas hasta llegar al punto de la ceguera.

Más allá de la información general sobre esta enfermedad y las formas en que se puede identificar, en el próximo artículo, también encontrarás información sobre los diversos métodos de tratamiento que pueden retrasar el desarrollo de la enfermedad e incluso detenerla. Por lo tanto, lee esta información cuidadosamente, acude al médico si es necesario y comparte este artículo con tus amigos y familiares.

Algunas cosas importantes que debes saber sobre la degeneración de la retina:

La retina es una capa del ojo ubicada en la parte superior interna. Su función es absorber la luz del ambiente y convertirla en señales nerviosas que se traducen en nuestro cerebro. La degeneración retiniana es una enfermedad que afecta el centro de la retina (mácula) y se estima que afecta a unos 150 millones de adultos en todo el mundo y es la causa más común de ceguera. La causa exacta de la enfermedad aún no está clara, pero se estima que hay varios factores de riesgo que afectan su desarrollo:

* Obesidad

* Alta presión sanguínea

* Fumar

* Historia familiar

La degeneración de la retina se puede dividir en dos tipos principales y si detecta incluso algunos de estos síntomas, se recomienda que visites periódicamente a tu oculista:

* Degeneración retiniana seca: esta es la forma más leve de la enfermedad que se desarrolla lenta y gradualmente. Entre el 85-90% de las personas con degeneración retiniana en el mundo sufren de la forma seca. Esta situación no tiene una solución médica, pero es posible retrasar su progreso y prevenir el deterioro de varias maneras, que discutiremos a continuación.

* Degeneración retiniana húmeda: en esta afección, además de la degeneración de las células retinianas, también se producen fugas de los vasos sanguíneos en la misma área. Esta es una afección más grave, que puede provocar una pérdida de visión severa y rápida. Sin embargo, en el caso del diagnóstico temprano, se pueden tomar medidas inmediatas para tratar la enfermedad y prevenir la pérdida de visión.

¿Cuáles son los síntomas principales de la enfermedad?

El diagnóstico temprano de la degeneración de la retina es fundamental para tratar la enfermedad y prevenir la ceguera. Para este propósito, es importante conocer las señales de advertencia que indican la degeneración de la retina:

* Los síntomas de la degeneración retiniana seca incluyen, entre otras cosas, la necesidad de una luz más brillante para leer, desenfoque y dificultad para leer textos escritos, dificultad para adaptarse a la poca luz, disminución de la intensidad en el brillo y la intensidad de los colores, disminución de la capacidad para reconocer los rostros de las personas y, en general disminución de la función ocular a una edad avanzada.

* Los síntomas de la degeneración retiniana húmeda se consideran más graves y menos sutiles. La enfermedad puede hacer que las personas vean líneas rectas como curvas o dobladas. También puede causar puntos negros en el centro de visión, que crecerán cada vez más en ausencia de tratamiento.

Es importante comprender que los síntomas pueden no ser siempre los mismos en ambos ojos. Es posible que un ojo experimente una degeneración grave mientras que el otro ojo puede no experimentar ningún síntoma al principio. En cualquier caso, si sospecha que algo está mal con tus ojos, siempre es mejor acudir a un oftalmólogo calificado lo antes posible. Las pruebas periódicas y la detección temprana pueden controlar los síntomas de la enfermedad y, en algunos casos, salvarlo de la ceguera.

¿Cómo se realiza el diagnóstico?

El diagnóstico de degeneración de la retina se realiza mediante un examen ocular realizado por un oftalmólogo u optometrista. Para mayores de 50 años, se recomienda hacerse estas pruebas todos los años. El diagnóstico se puede hacer de tres maneras principales:

* Prueba de cuadrícula de Amsler: una prueba simple y preliminar en la que el paciente mira las líneas horizontales y verticales para ver si ven las líneas distorsionadas.

* Angiografía con fluoresceína: después de que tu médico inyecta un tinte de color en una vena de tu brazo, el tinte viajará para resaltar los vasos sanguíneos en tus ojos. Luego, el médico examina el ojo con accesorios de aumento para identificar fugas en los vasos sanguíneos.

* Tomografía de coherencia óptica: esta es una prueba de imagen óptica que le brinda al médico una imagen más precisa del ojo y permite un diagnóstico más eficiente de los cambios y anormalidades de la retina.

¿Cómo se trata la degeneración retiniana?

Como se señaló, en la mayoría de los casos, el diagnóstico temprano ayudará a adaptar el tratamiento que retrasará el deterioro de la enfermedad y, en algunos casos, incluso evitará que el paciente alcance un estado de ceguera. Para hacer esto, por supuesto, es importante garantizar el tratamiento continuo y el seguimiento por parte de un oftalmólogo calificado, pero al mismo tiempo, todavía no hay tratamiento médico en forma de medicamentos o cirugía para curar completamente la enfermedad. En algunos casos, su médico también puede recomendar un tratamiento con láser para la degeneración retiniana húmeda. El médico también recomendará ampliar los textos para leer usando una lupa o ayudas tecnológicas avanzadas.

Junto con las herramientas convencionales, la medicina china ofrece otras formas de complementar el tratamiento y proporcionar una forma holística, amplia y efectiva de retrasar la enfermedad. Estos son algunos de los factores que hacen que sea efectivo:

Vitaminas, minerales y antioxidantes: nuestra dieta tiene un impacto significativo en el funcionamiento de los sistemas del cuerpo y, por supuesto, también en los ojos. Los estudios demuestran que para retrasar la progresión de la enfermedad, se recomienda aumentar el consumo de las siguientes sustancias: vitamina C, vitamina E, óxido de zinc, óxido de cobre, luteína y zeaxantina.

Grasas saludables: en una revisión de varios estudios realizados en 2008 en la Universidad de Melbourne, Australia, los ácidos grasos omega-3, que se encuentran en el aceite de pescado, semillas y nueces, pueden retrasar la degeneración de la retina.

Acupuntura: la acupuntura permite un mejor flujo de oxígeno a la mácula, lo que ralentiza la enfermedad e incluso la detiene. El tratamiento permite que las células dañadas por la degeneración macular se ‘despierten’ y mejoren su funcionamiento.

Las herramientas disponibles de la medicina china pueden mejorar en gran medida el funcionamiento de los ojos que sufren de degeneración retiniana. Para disfrutar de todos estos beneficios y prevenir el deterioro de la visión, se recomienda utilizar un terapeuta calificado con experiencia en el tratamiento de enfermedades oculares. YTL