martes, 31 de diciembre de 2019

Narciso Arribas Arnaiz, Beato

Religioso y Mártir, 01 de Enero
Martirologio Romano: En Novales (Cantabria), España, beatos Pedro (Jaime) Cortasa Monclús, Narciso (Baldomero) Arribas Arnaiz, Néstor Eugenio (Tesifonte) Ortega Villamudrio, Columbanus Paul (Henri) Oza Motinot, religiosos de los Hermanos Maristas, mártires de la persecución religiosa en época de la Guerra Civil ( 1937).
Fecha de beatificación: Junto a otros 67 mártires maristas, que integraron el grupo de 522 mártires beatificados en Tarragona por S.S. Francisco el 13 de octubre de 2013.

Nacimiento. Infancia
Baldomero nació en Santibáñez de Esgueva, provincia y diócesis de Burgos, el 27 de febrero de 1877. Era el menor de los tres hijos del matrimonio formado por Martín y María. Al día siguiente de su nacimiento, fue bautizado en la iglesia parroquial de su pueblo, dedicada a la Asunción de Nuestra Señora; el ministro del bautismo le dio por abogados a los santos mártires Román, Teófilo y Justo. Fue confirmado e hizo primera comunión en la misma parroquia.
Su pueblo natal. Primera educación. Ingreso en el seminario marista
Santibáñez -cuyos orígenes se sitúan en el siglo X- se asienta en la falda de una colina y mira hacia las riberas del río Esgueva. Su ermita románica de San Salvador del siglo XII; posee una plaza con típicos soportales y conserva en su casco urbano un hermoso rollo -columna de piedra-, que se erigía en lugares que tenían plena jurisdicción para juzgar y condenar a muerte-, usando también  de picota para mostrar a los reos y exponer las cabezas o los cuerpos de los ajusticiados. En el último cuarto del siglo XIX, el censo de Santibáñez se mantuvo alrededor de los doscientos cuarenta habitantes -hoy tiene unos ciento treinta-; sus vecinos se ganaban la vida trabajando de sol a sol los campos, en los que cultivaban legumbres, cereales, patatas, vid cáñamo; para completar sus recursos, criaban ganado y aprovechaban la caza y la pesca, que abundaban en el pueblo.
Baldomero y sus dos hermanos asistieron a la escuela del pueblo. Sus padres, profundamente religiosos, los educaron en la fe y en la práctica de las virtudes cristianas, lo que sin duda contribuyó a que se despertara la vocación religiosa en el benjamín de la familia, que respondió con generosidad a la llamada de Dios. Así, pues, Baldomero ingresó en el año 1890 en la casa marista de Canet de Mar (Barcelona).
Vida religiosa, docencia
El 22 de enero de 1892 pasó al noviciado en la misma casa y vistió el hábito religioso el 8 de diciembre de ese año, recibiendo el nombre de H. Narciso. El 7 de agosto de 1894, hizo el voto de obediencia, según la costumbre de aquellos tiempos. El 28 de agosto de 1898 emitió los votos perpetuos en San Andrés de Palomar (Barcelona), consagrando para siempre su vida a Dios en el Instituto marista.
En la escuela normal de Girona, obtuvo el H. Narciso el título de maestro elemental en junio de 1894 y el superior en septiembre de 1896. Empezó su largo apostolado entre los niños en agosto de 1894: ejerció la docencia en los colegios maristas de Canet de Mar, Girona -en el que fue profesor entre 1895 y 1901 y director entre 1901 y 1903-, Palafrugell (Girona), Tarazona (Zaragoza) -una escuela agrícola que dirigió en el curso 1904-05-, Cartagena, Murcia, Malgrat de Mar (Barcelona), Calatayud (Zaragoza), Cullera (Valencia), Girona otra vez, Igualada (Barcelona), Lleida, Toledo, Zaragoza, Calatayud de nuevo y Cabezón de la Sal, donde se hallaba al estallar la guerra civil.
Su perfil humano y religioso
Durante su adolescencia y su juventud, fue un muchacho muy alegre, sencillo y aplicado; siempre dispuesto a servir a todos y a serles de utilidad; por entonces, ya mostraba una enorme ilusión en prepararse para ejercer su futuro apostolado de la enseñanza. Ya hombre, manifestó una especial sencillez evangélica, puso su mira en Dios y trabajó sin dejarse llevar nunca por el respeto humano. En las comunidades por las que pasó, fue muy querido por los hermanos y por los alumnos; en todas ellas, se distinguió por su buen espíritu, y tuvo fama de ser un religioso muy ejemplar -pobre, casto y obediente y fiel cumplidor de las reglas. Destacó así mismo en la enseñanza, ya que fue un excelente profesor.
Después de 39 años de experiencia educativa, en agosto de 1933, el H. Narciso llegó a Cabezón, su último destino. Allí se sintió feliz al poder dedicarse a educar a los chicos más desfavorecidos y a atender a sus familias, hacia quienes sentía una especial predilección. Les dio tantas muestras de su caridad que era conocido con el sobrenombre de «amigo de los pobres». Sin embargo, tuvo que sufrir y mucho por su celo y su caridad, ya que el director recibió una carta anónima en la que se reprobaba que el H. Narciso se preocupara tanto  de las familias menesterosas. A pesar del anónimo, él no cambió su comportamiento.
Detención y martirio:
Los cuatro hermanos del colegio de Cabezón y los tres del de Carrejo fueron detenidos el 30 de diciembre de 1936  y conducidos a la cárcel de Santander. El primer día del año 1937 el H. Narciso fue «sacado» de ella junto a los HH. Pedro, Néstor Eugenio y Colombanus Paul y no se ha sabido nada más de ellos. Es probable que les quitaran la vida en esa misma fecha, arrojándolos al mar desde el faro.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario