Las patatas son alimentos que forman
parte habitual de nuestra dieta, y aunque no sean un alimento dietético, si que
en realidad pueden ser parte de una alimentación saludable. Lejos de lo
que se pueda pensar, nos pueden ayudar a la hora de perder peso.
En
esta ocasión te vamos a explicar cómo
adelgazar a base de patatas, un producto que podrías incluir en tu dieta
y que puedes preparar de maneras muy diversas.
Las patatas y sus múltiples beneficios
Las patatas son un tubérculo muy
común en la cocina, siendo un alimento que acostumbramos a comer de múltiples
formas. Esto se debe a que es muy versátil a la hora de cocinarlo; y siendo un
producto natural con múltiples
beneficios para la salud.
La
patata posee un elevado aporte de hidratos de carbono, fibra, vitamina B6,
vitamina C, potasio y manganeso, así como una gran fuente de antioxidantes.
Además, son poco calóricas y
tienen una gran capacidad saciante.
Ayudan a adelgazar
Las
patatas tienen un alto índice
glucémico, por lo que se deben consumir con moderación en el caso de que
se padezca diabetes. No obstante, ayuda a la hora de perder los kilos de más. Esto se debe
a que contiene tan solo 80
calorías por cada 100 gramos, dos veces menos que el aguacate. Además, hay que tener
en cuenta que son una buena fuente
de vitaminas y minerales; y destacan por ser muy saciantes, ya que son ricas en
fibra soluble, almidón resistente e inhibidores de la proteasa-2.
Las patatas ayudan a quemar grasa
Las patatas también aportan grandes cantidades
de polifenoles, que son
antioxidantes que hacen frente al envejecimiento prematuro. Además, hay que
tener en cuenta que se trata de un alimento que acelera el metabolismo. Por otro lado, hay que tener
en cuenta que son ricos en potasio,
ayudando a prevenir la retención de líquidos en el cuerpo y favoreciendo la
pérdida de peso. Diferentes estudios han podido demostrar que estos tubérculos
ayudan a quemar grasa corporal.
Cocidas y enfriadas, la forma más saludable de consumir
patatas
La
forma más saludable de consumir las patatas y aprovechar todos sus beneficios
es cociéndolas con piel y
posteriormente enfriándolas con agua. Estos tubérculos poseen almidón
resistente que se encuentra relacionado con una mejora de la tensión arterial,
la salud digestiva, la
absorción de nutrientes y la capacidad para saciar.
Las
patatas que son cocidas y enfriadas mantienen un alto nivel de este almidón,
siendo las que más aporte del mismo ofrecen de todas las elaboraciones que
existen. Asimismo, al cocinarlas de esta manera, la piel continúa teniendo una elevada cantidad de fibra, y sus
calorías no crecen tanto como cuando se fríen.
Al vapor y al microondas, otra forma de elaborarlas
A
la hora de preparar las patatas tenemos muchas posibilidades, siendo algunas de
ellas la de hacerlo al vapor y al
microondas. Prepararlas de esta manera hace que no aumenten sus
calorías, ya que no se necesita
emplear aceite como en las frituras; y si no se pelan mantendrán
gran parte de sus nutrientes. Al igual que en el caso anterior, si se enfrían
tras haberlas calentado, tendrán
mayor cantidad de almidón resistente. De hecho, cuando se cocinan al
microondas pierden una menor cantidad de nutrientes, ya que no se utiliza agua.
Patatas fritas, no recomendadas para adelgazar
Freír
las patatas hace que estas aumenten
notablemente sus calorías, siendo así menos saludable y más perjudicial
para la salud. Esto todavía empeora en el caso de que se haga uso de un aceite
vegetal como el de girasol, que se oxida con mayor facilidad que el de oliva. Asimismo,
para preparar estas patatas, estas se suelen pelar, y esto hace que pierdan
fibra y sacien menos. Esto, sumado a su mayor aporte calórico, hace que ayuden a aumentar de peso.
Al horno, una de las recetas más saludables
Otra
de las formas de elaborar las patatas es asadas al horno. Esta es una de las recetas más interesantes y
saludables, ya que pueden conservar tanto el almidón resistente como la piel y
todos sus nutrientes. Asimismo, haciendo uso de este electrodoméstico se puede
llegar a lograr que tengan un
toque crujiente sin tener que freírlas. Para conseguir un acabado
que no sea seco se puede usar aceite de oliva. No obstante, al hacerlo
aumentará la cantidad de calorías.
Las patatas de bolsa son poco saludables
Un
clásico snack son las patatas de
bolsa, las cuales no son nada recomendables ya que son poco saludables. Habitualmente se
encuentran mezcladas con aceites que incrementan su número de calorías. Además,
al prepararse de esta manera sus valores nutricionales y aporte de minerales y
fibra están muy reducidos, lo que hace que se conviertan en un alimento muy calórico y nada saciante,
con pocos nutrientes en comparación con otros métodos de prepararlas.
Un alimento altamente saciante
Aunque
pueda no parecerlo a priori, la realidad es que las patatas son un alimento altamente saciante. Además de tener
numerosos beneficios nutricionales, produce este efecto que puede llegar a ser
muy interesante de cara a la pérdida de peso.
Aquellos
alimentos que tienen una mayor capacidad saciante son los mejores para adelgazar, ya que
hacen que se eviten los «dolores» habituales de cuando se tiene hambre. Por
este motivo, para bajar de peso es recomendable incluirlas en la dieta.
Fortalecen el sistema inmunitario
Las patatas fortalecen
el sistema inmunitario gracias a su
contenido en carotenoides, quercitina, antocinaninas, ácido clorogénico y
acídos cafeicos. También ayudan a
controlar el azúcar en sangre y
disminuyen las concentraciones de colesterol y triglicéridos.
Son un alimento rico en fibra que es excelente contra el
estreñimiento, al ayudar a regular el tránsito intestinal. Además, están
indicadas en caso de gastritis y posee componentes antioxidantes.
De esta manera, nos encontramos ante un alimento que además de ser muy sabroso
es también muy nutritivo y saludable, siempre y cuando se cocinen de la manera
adecuada. MAChR
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