O has tenido mucha
suerte o seguro que has vivido algún desengaño amoroso que te ha llevado a
sufrir enormemente. Es una sensación muy dolorosa que afecta físicamente mucho
más de lo que la gente se piensa.
Dolor físico
Física y emocionalmente, el dolor afecta en gran
medida a nuestra salud y activa la misma parte del cerebro. Aunque técnicamente
no es físico, tu cabecita sí le envía esa 'orden' al cuerpo ¡y por eso todo es
tan real!
Partes del
cuerpo específicas
Ante un desengaño o pérdida amorosa, es normal que
sientas dolores de estómago, náuseas e incluso jaquecas. El pecho puede ser otra de las partes
que duelan más; normalmente como resultado del estrés y las reacciones
negativas que nos genera esta situación. Tus ojos se hinchan y ponen rojos por lo
mucho que lloras. La sal de tus lágrimas es la que provoca esta situación. También hay
personas que tienen problemas dermatológicos en respuesta de las hormonas al
estrés o trauma causado.
Periodo complicado
El amor puede ser tan adictivo como las drogas y
crear problemas químicos reales en el cerebro. Cuando eso se desbarata,
podemos tener síntomas de abstinencia. ¡No es ninguna broma! Estudios recientes han encontrado que se
activan las mismas zonas del cerebro que los adictos a la cocaína cuando nos
rompen el corazón. Esto significa que experimentamos algunos de los mismos
síntomas que cuando ellos no tienen la droga presente.
La hormona
del estrés
La principal se llama cortisol y afecta, cómo no, a
tu cuerpo. No sólo en la forma en que digerimos o tenemos dolor de estómago,
sino en el propio sistema inmunitario.
Sistema
inmunitario
Si está débil, podemos ser más susceptibles a virus
y bacterias (causantes de otras enfermedades). ¡Hay que cuidarse!
Insomnio
No dormir bien por la noche es un síntoma común
entre personas con problemas en el 'amor'. Tu cuerpo se cansa, tu mente te
alborota y se mantiene despierta todo el tiempo imaginando antiguos y nuevos
escenarios.
Perder peso
Como humanos que somos, la forma de responder ante
el dolor es distinta siempre. Las hormonas del estrés se asocian al apetito
constantemente y pueden hacer que enfermes en este sentido.
Aumentar de
peso
En el otro lado de la moneda existe también esta posibilidad,
claro. Hay personas que comen compulsivamente para paliar (eso piensan) la
situación. Intenta no pasar por ahí.
Efectos en
el cerebro
De acuerdo con Bolde, el estrés puede reducir
tus capacidades y hacer que te sientas un poco distraído o confuso de más. Según informa The Cut, nuestra identidad puede verse afectada
también. Muchas veces ya no sabemos cómo definirnos o afrontarnos como parte de
una pareja.
Falta de
motivación
Puede que tengas alguna dificultad en realizar las
tareas diarias de siempre porque ya no sientes ganas de comer, hacer deporte o
incluso prepararte y vestirte bien. Ante todo, sé consciente de que es una
etapa que pasará.
Perder el
cabello
Si se te cae el cabello más que nunca, es efecto
del estrés que estás sufriendo. Tener el corazoncito roto desencadena muchos
síntomas...
Desamor
total
De acuerdo con el Daily Mail, en algunos casos
muy específicos algunos síntomas pueden complicarse y hacer que las personas
fallezcan. ¡No pienses en ello, eso sí! No sólo estás más susceptible a todo lo que te rodea cuando
ocurren este tipo de situaciones, sino que tu presión sanguínea se eleva como
el pulso del corazón y tienes más riesgo de sufrir alguna enfermedad
cardiovascular.
Tómate tu
tiempo
Sí, el desamor o la pérdida son tremendamente
dolorosos y cansados, pero necesitas un buen tiempo para respirar hondo y ver
qué hacer a continuación.
Comprométete
con tu diario
Parece una tontería, pero es vital llevar un
control de nuestras emociones apuntadas para realizar una catarsis mental y ver
después los problemas con perspectiva.
Haz
ejercicio, ¡desperézate!
La actividad física (demostrado científicamente)
genera endorfinas, culpables de hacer que nuestro cuerpo y nuestra mente se
sientan bien. Entrenar en algo
que te guste puede ayudarte a tener un duelo más calmado y menos sufrido.
¡Tendrás la sensación de que tú controlas el panorama alrededor!
Prueba cosas
nuevas
Crear es crecer. Busca actividades que siempre te
habían llamado la atención pero con las que nunca te habías atrevido, por
ejemplo. Te conectará con otras personas (que quizá están pasando por lo mismo
que tú) y te dará una razón más para disfrutar de la vida.
Pide ayuda,
no temas
En algunos casos es necesario que intervenga un
profesional (psicólogo, por ejemplo). Ellos sabrán qué hacer para salir de la
espiral negativa con esfuerzo y positivismo.
Ayudar es reconfortante
Sin ninguna duda: de acuerdo con Psychology
Today, ayudar a los demás provoca una sensación de bienestar indescriptible que
te despertará poco a poco de la oscuridad.
Aliméntate
en condiciones
Tu cuerpo querrá, ante el dolor, comer todo lo peor
que haya. No le dejes: piensa lo bien que te sentará llevar una dieta
saludable. ¡Hazte con toda la energía de la fruta y la verdura!
Déjate
querer
Puede que en algún momento sientas que estás solo o
no encuentras la compañía adecuada... Rodéate de las personas queridas que
siempre han estado ahí, que no te dé apuro.
Llora si lo
necesitas
El bioquímico William H. Frey ha demostrado que las
lágrimas de pura emoción contienen elementos tóxicos creados por el estrés. Por
eso es tan importante llorar cuando sentimos que lo necesitamos, ¡porque así
liberamos todo lo malo!
Practica el
'Mindfulness'
Es un
mecanismo óptimo para ayudarte a meditar, reflexionar sobre ti mismo y lo que
necesitas. Te dará una perspectiva distinta sobre los problemas que te rodean.
Date una oportunidad nueva.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario