Hay
algo que esperar con ansias acerca de envejecer: el contento y la satisfacción
aumentan con la edad. La investigación ha encontrado que las personas en sus
noventa son incluso más felices que las personas en sus setenta. Pero antes de
comenzar a celebrar, debes asegurarte de llegar allí. Nunca es tarde para
comenzar de nuevo. Incluso si has descuidado los hábitos saludables en tu día a
día, todavía hay beneficios en cambiar tu estilo de vida ahora. Puedes reducir
el riesgo de enfermedades cardíacas, cáncer y fracturas óseas haciendo cambios
inteligentes con el ejercicio y comiendo de manera saludable.
1. Usa la tecnología para seguir tus hábitos
Cuando
comienzas a hacer cambios, es útil tener una imagen más completa de tu salud, y
hacer un seguimiento de tu progreso te ayuda a gestionarlo mejor. Puedes
controlar tu ejercicio con monitores de actividad y podómetros. También puedes
registrar tu ejercicio y la ingesta de alimentos con aplicaciones para
teléfonos inteligentes o controlar tu presión arterial con una máquina de
presión arterial doméstica (tensiómetro).
2.
Usar protector solar y decir adiós a las arrugas
El uso
de protector solar cada día previene las arrugas y protege tu piel contra el
envejecimiento innecesario. Usa un producto con al menos un factor de
protección solar de 30.
3.
Adopta una mascota
Las
mascotas pueden ayudar para algunas personas a llenar la ausencia que a menudo
crea un “nido vacío” sin los niños o la pareja que alguna vez anduvieron por
allí. Los estudios han demostrado que las personas con mascotas tienen menos
colesterol, enfermedades del corazón y visitas generales al médico. Tener un
perro también te da una razón para salir a caminar, lo cual es una excelente forma
de ejercicio.
4. Ejercicio para disminuir tus posibilidades de Alzheimer
El
ejercicio puede ayudar a aumentar el flujo de sangre a tu cerebro y facilitar
el crecimiento de nuevas células cerebrales. Los estudios han demostrado que el
ejercicio regular en la mediana edad puede disminuir el riesgo de pérdida de
memoria y degeneración cognitiva en un 39%. No tienes que ingresar a maratones:
30 minutos de caminata, ciclismo o jardinería cinco veces a la semana es más
que suficiente para estimular el flujo de sangre.
5.
Redescubrir el sexo
Solo porque estés envejeciendo no significa que tengas que renunciar
al sexo. Es importante como forma de ejercicio y para tu felicidad. Con la
edad, la experiencia puede ser diferente y mejor: tienes más tiempo, menos
interrupciones y sabes lo que te gusta.
6. Cuidado con la sal
La presión arterial tiende a aumentar a medida que envejecemos, y el
sodio es a menudo la causa. La sal a menudo se oculta en alimentos tales como
alimentos envasados o enlatados, pan y panecillos. Si quieres combatir el sodio
de forma natural, come un plátano. Su alto contenido de potasio mantiene tu
presión arterial baja y ayuda a disminuir el efecto del sodio en su dieta.
7. Sé más selectivo con tus opciones de comida
Debido a que tu metabolismo se ralentiza con la edad, necesitas
menos calorías en tu dieta. Esto significa que debes ser más selectivo y elegir
alimentos con muchos nutrientes. Las buenas opciones son las verduras de hoja
verde, o las frutas y alimentos fortificados con vitaminas, como cereales y
leche. También es aconsejable reducir los dulces y las bebidas azucaradas, ya
que tienden a tener muchas calorías.
8. Incluye grasas buenas en tu dieta
Si bien
es una noticia antigua que las grasas saturadas causan estragos en las arterias
y el corazón, no es tan conocido que puedan dañar tu memoria y concentración.
Si bien es una buena idea reducir los alimentos saturados en grasas (por
ejemplo, la carne roja y la mantequilla), es igualmente importante agregar
grasas buenas a tu dieta. Los ejemplos son los pescados grasos, semillas y
frutos secos. Estas grasas tienen un valor agregado tanto para el corazón como
para el cerebro.
9.
Realiza ejercicios de fortalecimiento
Un
estudio reciente encontró que el entrenamiento de fuerza regular ayudó a revertir
el proceso de envejecimiento en los músculos de las personas mayores. Asegúrate
de incluir tanto ejercicios aeróbicos como de musculación en tu rutina de
ejercicio.
10.
Sé una “mariposa social” y haz voluntariado
Los
estudios demuestran que las personas que se relacionan con familiares y amigos
tienen menores riesgos de problemas de memoria y, en general, tienen una mente
más aguda. Del mismo modo, el voluntariado se ha relacionado con la longevidad
y menores tasas de enfermedad cardíaca. Los estudios revelan que cuanto antes
comiences, menores serán tus riesgos para la salud.
11.
Incluye ejercicios de equilibrio en tu vida
Al elegir una forma de ejercicio, considera el Tai Chi u otros
movimientos centrados en el equilibrio. Esto puede ayudarte a prevenir futuras
caídas y lesiones. Un estudio encontró que seis meses de Tai Chi ayudaron a
reducir las posibilidades de caer a la mitad.
12. Participa en el aprendizaje
Buscar nuevas experiencias mantiene la mente joven y saludable
porque ayuda a construir nuevos caminos en el cerebro. Prueba un nuevo idioma,
instrumento musical o nuevas aficiones. Esto también puede ayudarte a hacer
nuevos amigos y ampliar tus opciones de emoción y felicidad. LDG
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