sábado, 29 de febrero de 2020

Simplemente sucede...


Mago... 03


Mago... 02


Como somos...


Virgen... 241


David de Gales, Santo

Obispo, 01 de Marzo
Elogio: En Menevia, en Cambria, san David, obispo, que, imitando los ejemplos y virtudes de los Padres orientales, fundó un monasterio, del que procedieron muchos monjes que evangelizaron Cambria, Irlanda, Cornualles y Armórica.

Importante figura de obispo y monje, evangelizador de la Bretaña, distinguido representante de la Iglesia celta de Gales. Vivió en el siglo VI y murió en 601; aunque es mencionado en documentos de los siglos VIII - X, su biografía fue escrita recién en el siglo XI por una cierto Rhygyfarch. Es muy fantasiosa y remeda la de san Benito.
David era hijo de Sant y de Nonna, y nació en el valle de Rhos, fue educado y formado por san Iltuto y después por Paulino; fue ordenado sacerdote y se retiró a una isla solitaria, donde permaneció diez años dedicado al estudio de la Sagrada Escritura. Luego abrazó la vida monástica y comenzó a evangelizar la Britannia (es decir, la actual Gran Bretaña, no la Bretaña francesa), todavía habitada por pueblos celtas; fundó doce monasterios, en los que estableció una vida de comunidad, austera, llena de estudio, trabajo y oración. Sobrevivió a un intento de envenenamiento de parte de los monjes, tal vez debido a la excesiva austeridad (en aquellos tiempos se intentaba resolver así algunos problemas de intolerancia, y también otros problemas). Fue a Jerusalén, donde fue consagrado obispo.
Al regresar a la patria sucedió a san Dubricio como obispo de Caerlon, de donde luego se trasladó a la sede de Menevia. Fue muy influyente en la vida monástica en el País de Gales, donde presidió varios sínodos, en los que se adoptaron decisiones disciplinarias y teológicas de importancia para la Iglesia celta. Aunque es difícil de creer, afirma la «Vida» que David vivió 147 años; su tumba se convirtió en un lugar de peregrinación y con su nombre se han titulado muchas iglesias en Gales, en Irlanda y en Inglaterra.
Casi cuatro siglos después de su muerte, en el 966, su cuerpo fue trasladado a Glastonbury. Se celebra el 1 de marzo tanto en el Martirologio Jeronimiano como en el Celta y el Irlandés. Del monasterio y la iglesia fundados por él en Menevia, ahora Saint-David, no queda nada; en la única obra iconográfica donde se lo representa son los frescos de la iglesia de Saint Diwi de Landerneau, que lo muestra en el milagro obrado cuando la tierra donde estaba parado predicando se levantó para formar una colina, y la paloma del Espíritu Santo vino a posarse sobre su hombro.

¿Sabes cómo proteger tu hígado?

El hígado, un órgano que es encuentra en el lado derecho debajo de la caja torácica, juega un rol crucial en el proceso digestivo y en muchas otras funciones del organismo, tales como la producción de proteínas y la producción de bilis, una sustancia que ayuda a reducir la cantidad de grasa del cuerpo. Además, el hígado mantiene estables los niveles de azúcar, grasa y hierro.
Las enfermedades hepáticas son un conjunto de trastornos, infecciones y condiciones médicas que afectan el tejido del hígado y su estructura, y pueden terminar ocasionando daños o afectando el funcionamiento hepático en su totalidad.
Síntomas más comunes de las enfermedades hepáticas:
•    Piel amarillenta
•    Fiebre
•    Dolor en la parte superior derecha del abdomen
•    Orina oscura
•    Sequedad en la boca
•    Esputación con sangre
•    Pérdida / Aumento de peso
•    Diarrea
•    Desarrollo de pecho (en los hombres)
•    Aumento del tamaño del hígado
•    Dolor de articulaciones
¿Cuáles son las principales causas de las enfermedades hepáticas?
- Falta de sueño (dormir más por la mañana que por las noches).
- Consumo de grandes cantidades de comida en una sola sentada.
- No orinar por la mañana.
- Consumir demasiados conservantes artificiales y endulzantes.
- Consumir comidas fritas cuando se está cansado.
- Infección por hepatitis A, B o E.
- Enfermedades autoinmunes que atacan las células del hígado causando inflamación.
- Consumo excesivo de alcohol.
Remedios caseros para tratar enfermedades hepáticas:
1. Té de Diente de León
Este té es uno de remedios caseros más efectivos a la hora de tratar enfermedades hepáticas. Puedes preparar esta infusión dos veces por día utilizando hojas de diente de león y una cucharadita de miel. Para obtener mejores resultados, te recomendamos utilizar la raíz de la planta. 
2. Cardo Mariano 
Este remedio casero puede tener muy buenos resultados en el tratamiento de enfermedades hepáticas. El consumo de semillas o té de cardo mariano te ayudará a mantener la salud del hígado y aliviar los síntomas de algunas enfermedades hepáticas. Diversos estudios han demostrado que esta planta puede ser un excelente agente curativo para problemas como la cirrosis, la hepatitis viral y la intoxicación.
3. Grosella India 
Además de ser una excelente fuente de vitamina C, la grosella india te ayudará a proteger el hígado y mantenerlo saludable. Se recomienda consumir entre 4 y 5 grosellas por día, solas o incorporadas en ensaladas y otras comidas. Estudios recientes han demostrado que el consumo de esta fruta mejora el funcionamiento hepático gracias a la estabilización de una enzima específica del hígado llamada  alanina aminotransferasa.
4. Cúrcuma 
El ingrediente activo de la cúrcuma, la curcumina, es conocido por sus poderosas propiedades antioxidantes y antisépticas, por lo que consumir esta especia de forma regular te ayudará a mantener el hígado en buenas condiciones. Una investigación ha demostrado que la cúrcuma puede proteger al hígado de los virus que causan la hepatitis A, B y E. Esta especia es muy fácil de incorporar a todo tipo de comidas e infusiones.
5. Papaya
La papaya es una de las frutas más efectivas a la hora de deshacerte de las enfermedades hepáticas o aliviar los síntomas de la cirrosis. Para tratar este tipo de enfermedades te recomendamos consumir de forma regular 3 cucharadas de papaya con una cucharada de jugo de limón durante 4 o 6 semanas hasta que los síntomas hayan mejorado o desaparecido.
6. Vinagre de Manzana 
Este es un remedio casero desintoxicante que te ayudará a eliminar toxinas del hígado y del organismo. Bébelo después de las comidas para que los niveles de grasa del cuerpo se mantengan saludables. Incorpora una cucharada de vinagre y una cucharadita de miel en un vaso con agua. Bebe esta preparación tres veces al día, para purificar el organismo por completo.
Otros tips para el buen cuidado del hígado: 
- Beber té verde todos los días ya que las catequinas ayudan a mejorar el funcionamiento hepático.
- La actividad física, aunque sea liviana, te ayudará a eliminar toxinas mediante el sudor y a mantener tu cuerpo en forma.
- Beber suficiente agua te ayudará a eliminar toxinas y mantener tu cuerpo, y tus órganos, saludables.
- Las manzanas y las verduras de hojas verdes también son poderosos agentes desintoxicantes.
- Evitar consumir alcohol.
- Los aguacates y las nueces son alimentos excelentes para el hígado. AG

Frutas que ayudan a bajar la presión arterial

¿Qué tan grave es?
Más de 76 millones de personas en EEUU sufren de hipertensión y por lo menos 16 millones de ellos ni siquiera lo saben. La hipertensión arterial aumenta la probabilidad de sufrir un ACV, un ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca, enfermedad renal y muerte temprana. Conoce las frutas aliadas para revertir o prevenir la presión arterial alta.
1. Los maravillosos arándanos
Los arándanos son una deliciosa herramienta contra la hipertensión arterial. Comer una porción a la semana ayudaría a disminuir el riesgo de desarrollarla, toda vez que contienen antocianinas, un compuesto que ejercería un efecto protector, según investigadores de la Universidad de East Anglia, Reino Unido y la Universidad de Harvard en EEUU.
2. El nutritivo kiwi
Incluir 2 o 3 piezas de kiwis en la dieta sería una excelente opción para mantener a raya la presión arterial, según un estudio del Hospital Universitario de Oslo, en Noruega. Es rico en luteína, un potente antioxidante.
3. Delicioso plátano
El plátano es una fuente rica en potasio juega un papel muy importante en la regulación de la presión arterial, ya que favorece la eliminación del sodio que consumimos y equilibra el líquido del organismo. Un estudio de la Universidad John Hopkins en los EEUU descubrió que comer plátanos es tan bueno como algunos medicamentos para controlar la hipertensión. Dos piezas al día durante una semana redujeron un 10% la presión arterial.
4. El refrescante melón
Es rico en potasio y agua, lo que lo convierte en un excelente alimento para favorecer la eliminación de toxinas y aumentar el flujo sanguíneo. 2 tazas de melón contienen más de 1,000 miligramos de potasio, cerca de un cuarto de la cantidad diaria recomendada, refiere la Dra. Lona Sandon, profesora asistente en la Universidad de Texas y portavoz nacional de la Asociación Americana de Dietética.
5. La tentadora manzana
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Utah, la quercetina actúa sobre una enzima relaciona con la regulación de la presión arterial, lo que ayuda a mejorar la circulación de la sangre y evita el estrechamiento de los vasos sanguíneos.
6. Prodigioso limón
El consumo regular de limón sería una buena manera de controlar la hipertensión, ya que la vitamina C que contiene actuaría como diurético, haciendo que el cuerpo elimine el sodio a través del agua, lo que a su vez relajaría las paredes de los vasos sanguíneos y disminuiría la presión sanguínea, según un estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad de Johns Hopkins, en EE.UU.
7. Las poderosas uvas
De acuerdo con investigadores de la Universidad de Connecticut y de la Universidad de Antioquia, los polifenoles (poderosos antioxidantes) y el rico contenido en potasio de la uva reducen la presión arterial y mejoran la salud de los vasos sanguíneos. Comer esta fruta 3 veces por día, según el estudio, ayudaría a producir óxido nítrico, un vasodilatador clave en casos de hipertensión.
8. Agua de coco
El alto nivel de potasio, antioxidantes y otros nutrientes del agua de coco hacen que se le considere como una opción efectiva contra la presión arterial elevada. Según un estudio de la Universidad de West Indian, el agua de coco resulta efectiva para combatir la hipertensión, bajando la presión sistólica en un 71% y la presión diastólica en un 29% en los participantes que la bebieron.
9. Irresistible sandía
Comer sandía diariamente mantiene la presión sanguínea a raya y protegería contra enfermedades cardíacas, de acuerdo con una investigación de la Universidad Estatal de Florida. Los hallazgos sugieren que la sandía contiene un compuesto llamado cucurbocitrin, que ayuda a dilatar los capilares sanguíneos y mejora la función de los riñones.
10. Guayaba
Un estudio realizado en la India y publicado en la revista Americana de Cardiología, mostró que añadir una guayaba diaria a la dieta habitual de un grupo de personas con hipertensión durante 3 meses, disminuyó la presión tanto sistólica como diastólica.
Esenciales en la alimentación
La OMS asegura que las frutas son un componente esenciales de una dieta saludable, y un consumo diario suficiente podría contribuir a la prevención de enfermedades importantes, como las cardiovasculares y algunos cánceres. Calcula que cada año podrían salvarse 1.7 millones de vidas si se aumentara lo suficiente su consumo.
Riesgos de no comer fruta
Un informe de la OMS refiere que la ingesta insuficiente de este grupo alimenticio es uno de los 10 principales factores de riesgo de mortalidad a escala mundial. Su ausencia produce aproximadamente un 19% de los cánceres gastrointestinales, 31% de las cardiopatías y un 11% de los ACV.
Lo que no hay que comer
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos recomienda reducir el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas, así como la comida procesada y frita. También se sugiere prestar atención a cómo se preparan los alimentos y descartar la sal en la medida de lo posible. HD

Coronavirus: ¿cuán grave puede ser contraerlo en comparación con las gripes de invierno?

“¿Un mensaje razonable? No experimentar pánico frente al coronavirus, que hasta ahora mostró un comportamiento expansivo a nivel geográfico, pero bastante benigno, con un índice de mortalidad que no llegó al 2,5%. Sí hay que tener la guardia alta en los ingresos al país, aislar casos sospechosos y entender que el alcohol en gel es menos efectivo que lavarse bien las manos varias veces por día”. Preciso y enfático, Domingo Palmero, médico director del Instituto de tisioneumonología “Profesor Dr. Raúl Vaccarezza” (dependiente de la Facultad de Medicina de la UBA), le puso paños fríos al tono dramático que domina, por estas horas, la marea informativa sobre el COVID-19.
Porque entre los apocalípticos y los negadores hay sitio para la sensatez. Es cierto que desde la OMS arrojaron ese angustiante “hay que estar preparados para una pandemia”, y que en sólo cinco semanas el contador pasó de cero a 2.800 muertos, y también de cero infectados a más de 81.000, en más de 40 países. Ahora bien, ¿y las 30.354 personas que contrajeron el coronavirus y se recuperaron? Asumiendo que la cepa llegará en algún momento a la Argentina, ¿qué tan amenazante es la enfermedad? ¿Cuánto peor que las variantes de influenza o gripes invernales?
Las cifras amedrentan o tranquilizan, según su presentación. Mientras la mortalidad del coronavirus está entre el 2% y el 2,5% de los casos (porcentajes que aumentan en los grupos de riesgo: bebés y adultos mayores), otros “bichos” ayudan a ver la magnitud de esas cifras, dijo Palmero: “La familia de los coronavirus son especies animales que saltaron y emitieron una patología humana. Además del agresivo Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS), que produjo cuadros respiratorios graves pero no salió mucho del área de Medio Oriente, hubo uno muy grave, el SARS (en español, Síndrome Respiratorio Agudo y Grave), que mostró una alta tasa de mortalidad, de entre el 10% y el 20% de los casos. Por suerte fue localizado y controlado. Esa sí generó pánico realmente”.
Pero cada invierno miles de seres en el mundo (la OMS dice que de 3 a 5 millones) contraen gripe estacional​, es decir, influenzas producidas por los virus estacionales A, B, C o D. Transitan un par de semanas largas con decaimiento, fiebre, tos seca, dolores articulares y secreción nasal. Los antibióticos les hacen cosquillas a esos virus.
Como no es obligatorio informar los casos de gripe, las estadísticas hacen agua. La OMS calcula que entre 5% y el 13% de los casos de influenza son letales. Una medición reciente del Centro Nacional de Estadísticas de Salud de Estados Unidos indica que “el 6,8 % de las muertes que ocurrió durante la semana que finalizó el 8 de febrero del 2020 se debió a casos de neumonía e influenza”. Bastante más que el coronavirus.
Palmero explicó que la persona que contrae COVID-19 puede manifestarlo con distintos niveles de gravedad (leve, grave o mortal), en sintonía con el comportamiento de cualquier gripe estacional: “Es relativamente benigno el cuadro. Puede ser un resfrío o un cuadro gripal, o haber, en cambio, compromiso respiratorio pulmonar, que se llama neumonitis viral. No son tantos los que llegan a ese cuadro. Hay que decir que la mayoría de los muertos son personas con enfermedades asociadas y ancianos”.
Otro dato importante es que mientras se detectan más enfermos y más muertos en más países, siguiendo los datos de la OMS, bajó la velocidad con la que crecía el número de casos. Esta tendencia en dirección a un amesetamiento tiene su lógica, explicó Palmero: “Hay algo que llamamos el genio epidémico, que sería el temperamento del virus. Pero, sea más o menos agresivo, todas las epidemias tienen un ciclo, una fase inicial, con pocos casos; luego, un ascenso rápido que puede incluso tener una multiplicación geométrica. Después, un punto máximo, y a partir de ahí empieza la declinación porque se van agotando los huéspedes susceptibles. Así evoluciona cualquier agente infeccioso, incluso el VIH”.
El problema es que si el coronavirus llegara a la Argentina y se replicara generando una epidemia, podrían verse todas las etapas del ciclo epidemiológico clásico, más allá de lo que ocurra a nivel global.
De todos modos, ni el virus es tan agresivo ni su tasa de mortalidad es tan alta. La razón por la que vale la pena atender sanitariamente al coronavirus está justamente en este punto: “Un nuevo virus se ha hospedado en la especie humana y, en la medida en que se replique de persona a persona, los virus hacen lo que se llama deriva antigénica, y es que pueden adquirir más virulencia”. Las llamadas mutaciones.
“Si mutará o no y cómo, no es previsible. Sería irresponsable no prestar atención a una epidemia que progresivamente se transforma en pandemia, a causa de un virus que no es tan riesgoso como el N1H1 (el de la gripe A de 2009), pero que no sabemos cómo será en el futuro”, aclaró el médico.
No son pocos los que por lo bajo señalan una “demora” en la reacción del Ministerio de Salud para hacer efectivos los controles fronterizos y aislar casos sospechosos de coronavirus. Para Palmero, “el control de las puertas al país es clave, tanto en los aeropuertos como en las zonas marítimas. Sirve para prevenir que ingresen pacientes con el virus y aislarlos si hiciera falta, hasta que hagan su evolución. Son dos semanas y el curso de la enfermedad es breve, de una o dos semanas, si todo va bien”.
Además, dijo, es necesario “tener las instituciones de salud preparadas para contener posibles contagios”.
¿Qué puede hacer uno mientras tanto? ¿Stockear barbijos y alcohol en gel? Nada de eso, aclaró: “La transmisión se hace a corta distancia, por microgotas y contacto, igual que el resfrío y la gripe. El barbijo es una medida relativa porque no evita el contacto y los que se venden en farmacias sirven más para proteger a los demás del resfrío de uno que al revés. El alcohol en gel es útil luego de haberse lavado las manos, que es realmente la medida más importante y fundamental para prevenir afecciones respiratoria”. PS

El miedo a perder

¿Qué tal si un día de cansancio, al terminar la jornada se comienza a soñar con el famoso Miguel Ángel Buonarroti? sería genial, especialmente si nunca se ha tenido un sueño con alguien como él...
Más extraño aún sería no poder hablar porque aunque se deseara, las palabras no salen de la boca. Entonces, toma su martillo, agarra con la otra mano el cincel (uno realmente enorme) y comienza la acción. Tal vez se podría gritar del susto pero no es posible. Se siente la descarga del martillo y una parte que se desprende. Una y otra vez se clava el cincel sin piedad y se experimenta cómo la tortura se prolonga pero aún ser sigue vivo... Días después en otra habitación, hay un espejo y ahora se entiende todo...
¿Qué tal si un día se tiene este sueño? Si en medio de la noche se está convencido de ser un bloque de mármol y Miguel Ángel logra una de sus obras más famosas: la Piedad, o el Moisés ¿verdad que habrían valido la pena los ‘garrotazos’? ¿Quién se lamentaría al ver el resultado a pesar de tanto dolor?
Sin embargo sucede que el artista de hoy en día, en la hermosura del arte de la educación, son otros; papás, mamás, profesores, sacerdotes... Pero cuando ha de caer el martillo para dar el ‘golpe’, el ‘mármol’ sí se lamenta, y los artistas, movidos por compasión, desisten. El resultado: mucho cariño, que nadie duda que sea sincero, pero finalmente el mismo trozo de mármol intacto.
Quisieran tal vez ser como ángeles protectores que pudieran estar el día entero cuidando a esa criaturita indefensa y evitándole todo mal posible porque le ha tocado vivir en un mundo supremamente injusto y sin compasión. Quisieran que nunca conocieran el dolor, la tristeza, el fracaso, todas esas cosas que tal vez ellos sí han tenido que padecer y que se siente sería mejor si se las pudieran ahorrar. Todo nace de un corazón que ama sinceramente y desea lo mejor para el amado.
Pero este no es el camino. No porque haya que volver a los tiempos en que se decía: “la letra con sangre entra”, sino más bien que las cosas más bellas y valiosas de la vida siempre se consiguen con esfuerzo y exigencia. No hay nadie que haya subido el Everest sin haber escalado una montaña menor y sin haber recibido un buen susto al quedar pendiente de una rama al borde de un precipicio. Nadie tampoco se cuelga al cuello la medalla de oro de los 100 metros planos si nunca en su vida a entrenado.
Hay que ser realistas y entender este principio. Sólo se cosecha lo que se cultiva. Los niños que hay que educar son maravillosos, con grandes y deslumbrantes talentos, pero todo esto se ve como se ve una semilla; se puede imaginar cuál será el futuro y cómo será de maravilloso, pero hay que comenzar por sembrarla, regarla, quitar las malas hierbas, etc.
La solución es sencilla de plantear pero hace falta decisión para aplicarla. Se trata de exigir con amor. Que cada reto que se plantea, cada llamada de atención, cada mirada fulminante de reprobación por un mal cometido, estén empapadas de ese cariño que no hay que improvisar, pues ya se tiene, y que cuando es sincero se transmite sin problema. Parecerá tal vez que la otra persona no lo percibe, pero es imposible confundir el amor de una mamá incluso cuando regaña, que el fastidio del profesor que se ha dado cuenta de que el alumno se ha salido con la suya.
Sirve también reconocer algo sencillo pero presente en la psicología de cada niño y adolescente, aunque no sólo en ellos. El hombre se mueve por lo que le atrae. Hay que saber motivarles para actuar, y luego sí, exigir. Si es necesario y justo también habrá que premiar. De manera que al final, después de una fuerte inversión de tiempo, paciencia, cariño, e incluso algo de dolor por la impotencia de no poder hacer con él todo lo que se quiere como se quiere, saldrá el fruto maduro de un hombre que no huye de la realidad que lo rodea sino que sabe afrontarla con gallardía y salir adelante en medio de las dificultades y problemas. Un hombre a fin de cuentas, completo y feliz. PPM

Día litúrgico: Domingo I (A) de Cuaresma

Texto del Evangelio (Mt 4,1-11): En aquel tiempo, Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. Y después de hacer un ayuno de cuarenta días y cuarenta noches, al fin sintió hambre. Y acercándose el tentador, le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes». Mas Él respondió: «Está escrito: “No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”».
Entonces el diablo le lleva consigo a la Ciudad Santa, le pone sobre el alero del Templo, y le dice: «Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: ‘A sus ángeles te encomendará, y en sus manos te llevarán, para que no tropiece tu pie en piedra alguna’». Jesús le dijo: «También está escrito: “No tentarás al Señor tu Dios”».
Todavía le lleva consigo el diablo a un monte muy alto, le muestra todos los reinos del mundo y su gloria, y le dice: «Todo esto te daré si postrándote me adoras». Dícele entonces Jesús: «Apártate, Satanás, porque está escrito: “Al Señor tu Dios adorarás, y sólo a Él darás culto”». Entonces el diablo le deja. Y he aquí que se acercaron unos ángeles y le servían.

«Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado»

Comentario: Mn. Antoni BALLESTER i Díaz (Camarasa, Lleida, España)

Hoy celebramos el primer domingo de Cuaresma, y este tiempo litúrgico ‘fuerte’ es un camino espiritual que nos lleva a participar del gran misterio de la muerte y de la resurrección de Cristo. Nos dice san Juan Pablo II que «cada año, la Cuaresma nos propone un tiempo propicio para intensificar la oración y la penitencia, y para abrir el corazón a la acogida dócil de la voluntad divina. Ella nos invita a recorrer un itinerario espiritual que nos prepara a revivir el gran misterio de la muerte y resurrección de Jesucristo, ante todo mediante la escucha asidua de la Palabra de Dios y la práctica más intensa de la mortificación, gracias a la cual podemos ayudar con mayor generosidad al prójimo necesitado».
La Cuaresma y el Evangelio de hoy nos enseñan que la vida es un camino que nos tiene que llevar al cielo. Pero, para poder ser merecedores de él, tenemos que ser probados por las tentaciones. «Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo» (Mt 4,1). Jesús quiso enseñarnos, al permitir ser tentado, cómo hemos de luchar y vencer en nuestras tentaciones: con la confianza en Dios y la oración, con la gracia divina y con la fortaleza.
Las tentaciones se pueden describir como los ‘enemigos del alma’. En concreto, se resumen y concretan en tres aspectos. En primer lugar, ‘el mundo’: «Di que estas piedras se conviertan en panes» (Mt 4,3). Supone vivir sólo para tener cosas.
En segundo lugar, ‘el demonio’: «Si postrándote me adoras (…)» (Mt 4,9). Se manifiesta en la ambición de poder.
Y, finalmente, ‘la carne’: «Tírate abajo» (Mt 4,6), lo cual significa poner la confianza en el cuerpo. Todo ello lo expresa mejor santo Tomás de Aquino diciendo que «la causa de las tentaciones son las causas de las concupiscencias: el deleite de la carne, el afán de gloria y la ambición de poder».

viernes, 28 de febrero de 2020

Rompiendo ladrillos...


Tarjeta roja...


Los músicos del Titanic...


En memoria de Kobe Bryant...


Coronavirus... 01


Por fin es viernes...


Vale la pena esperar...


Osvaldo de Worchester, Santo

Monje y obispo, 29 de Febrero
Elogio: En Worchester, en Inglaterra, san Osvaldo, obispo, que fue primero canónigo y después monje; presidió las sedes de York y de Worchester, introdujo en muchos monasterios la Regla de san Benito y fue un maestro benigno, alegre y docto.

Hijo de padres daneses, se hizo monje benedictino en Fleury, en Francia, y llegó a ser sacerdote en Inglaterra, en el 959. Por recomendación de san Dunstan, con quien san Osvaldo compartía los ideales monásticos, fue nombrado obispo de Worcester en el 961, donde convirtió el Capítulo en comunidad monástica, fundó dos monasterios en Westbury-on-Trym, cerca de Bristol, y el más influyente de Ramsey, para el cual obtuvo en préstamo de Fleury a san Abón, como maestro.
Cuando fue nombrado arzobispo de York, se le permitió mantener también la diócesis de Worcester. En la reacción antimonástica que siguió a la muerte de san Eduardo rey, las comunidades monásticas se dispersaron temporalmente. Sin embargo, san Osvaldo fue muy amado por el pueblo, ya que tuvo como característica personal la amabilidad, la cortesía y la alegría. Murió en Worcester el 28 de febrero del 992 después de lavar los pies a doce pobres y de sentarse con ellos a la mesa. Su cuerpo fue trasladado a un sepulcro nuevo por san Wulfstano, también obispo de Worcester desde 1062 hasta 1095.

Síntomas de un hígado poco saludable

El hígado es uno de los órganos más laboriosos del cuerpo. No solo elimina todas las toxinas de nuestro organismo, sino que también es responsable de otras quinientas funciones. Puesto que sabemos lo importante que es para nosotros, deberíamos saber cuándo nos está pidiendo ayuda. A continuación te damos a conocer seis señales de advertencia de que tu hígado está lleno de toxinas.
1. Dolor en el área hepática
La inflamación en el área superior derecha de tu abdomen es una señal de que tu hígado podría estar en problemas. Por lo general, es un dolor sordo. Sin embargo, a veces puede volverse bastante intenso. Recuerda que parte del trabajo del hígado es desintoxicar y ayudar al cuerpo, filtrar los desechos, y ayudar al cuerpo a digerir los alimentos en productos nutricionales. Cuando tu hígado está infectado, no puede operar de manera eficiente, se hincha dolorosamente y el cuerpo da señales de advertencia con dolores.
2. Hinchazón de piernas y tobillos
Si ignoras las llamadas de tu hígado en busca de ayuda, tu hígado deficiente tratará de repararse a sí mismo a costa de formar tejidos de cicatriz. Cuantas más tejidos tenga el hígado, más difícil será que funcione, lo que puede provocar hipertensión. Esto hace que el fluido se acumule en las piernas e hinchazón indolora que puede afectar ambas piernas. Sin embargo, debido a la gravedad, la hinchazón es más visible en la parte inferior del cuerpo.
3. Engordar
Cada año, más y más personas hacen más ejercicio y comen saludablemente, pero aún así combaten la pérdida de peso. Si experimentas un aumento de peso que no parece provenir de un mal funcionamiento hormonal o  de comer en exceso, es posible que desees hablar sobre una función hepática inadecuada con tu médico. Lo que ocurre es que el hígado no puede hacer frente a todas las toxinas que entran. Por lo tanto, lo único que se le ocurre es almacenar las toxinas sin filtrar en las células de grasa.
4. Alergias
Muy a menudo, las alergias son el resultado de un hígado lento y sobrecargado. Cuando hay demasiadas sustancias en el torrente sanguíneo, el cerebro las reconoce como alérgenos y libera anticuerpos e histaminas, que provocan erupciones pruriginosas. Un hígado saludable puede limpiar la sangre de todas las moléculas dañinas y disminuye el efecto que un posible alérgeno puede tener en el cuerpo. 
5. Piel y ojos amarillos
Cuando los ojos o la piel de una persona se vuelven amarillos, se los conoce como ictericia. Esta condición en sí no es una enfermedad, sino un síntoma de un posible mal funcionamiento. Normalmente, la ictericia aparece cuando un hígado enfermo hace que el sistema acumule demasiada bilirrubina, un pigmento amarillento que se forma cuando los glóbulos rojos muertos se descomponen en el hígado. Cuando el hígado no está funcionando lo suficientemente bien como para deshacerse de las células sanguíneas viejas y la bilirrubina, comienza a ponerse amarillo.
6. Fatiga crónica
Esto es similar a una enfermedad prolongada similar a la gripe. Por definición, necesitas experimentar los síntomas durante al menos 6 meses antes de que pueda diagnosticarse como fatiga crónica. La intoxicación del hígado puede causar esto. El hígado, en gran medida, contribuye al suministro de energía en el cuerpo. Ayuda a convertir la glucosa en glucógeno y la almacena para su uso posterior. Un hígado saludable vierte la glucosa entre las comidas o siempre que haya una necesidad de alimento y energía. Sin embargo, un hígado enfermo produce poca glucosa y no tiene espacio para almacenarla. 
Conclusión
No necesitas desesperarte si notas los síntomas de un hígado defectuoso. En primer lugar, el hígado tiene una capacidad increíble para curarse a sí mismo. Todo lo que tienes que hacer es darle un descanso de un estilo de vida destructivo. La limpieza de tu hígado se lleva a cabo con hábitos saludables.
Los científicos también dicen que hay una serie de productos naturales que pueden ayudar a aumentar el rendimiento hepático. La lista incluye té verde, agua de limón, cúrcuma y frutas y verduras orgánicas. YTL

Los falsos rumores sobre el coronavirus que recopiló la Organización Mundial de la Salud

Cada día que pasa crece la preocupación por el coronavirus de Wuhan (2019-nCoV). Más países confirman contagios y el número de víctimas mortales asciende a más de 2.700 personas. Ante esta situación, las redes sociales se han convertido en un hervidero de noticias sobre la situación. También se han difundido numerosos consejos para prevenir el contagio, aunque muchos de ellos son falsos o carecen de base científica.
Desde la OMS han recopilado varias de las mentiras que circulan por Internet sobre el coronavirus y también han publicado una serie de explicaciones para aclarar algunas de las dudas que han surgido en torno a esta enfermedad.
Secadores de manos
La OMS aclara que los secadores de manos no matan el coronavirus, como afirman algunos rumores. “Para protegerte del coronavirus, debes lavarte las manos frecuentemente con un gel hidroalcohólico o con agua y jabón. Una vez limpias, sécalas bien con toallitas de papel o con un secador de aire caliente”.
Picaduras de mosquito
El 2019-nCoV “es un virus respiratorio que se propaga principalmente por contacto con una persona infectada a través de las gotículas respiratorias que se generan cuando esta persona tose o estornuda, por ejemplo, o a través de gotículas de saliva o secreciones de la nariz”, explican en la web de la OMS, donde se deja claro que no hay pruebas que indiquen que el coronavirus pueda transmitirse por medio de mosquitos.
Orina infantil
También han circulado mensajes en los que se decía que la orina infantil podía matar el virus. La OMS alerta de que esto no es cierto. Lo más efectivo es lavarse las manos a menudo con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón y limpiar las superficies con desinfectantes domésticos comunes.
El frío o la nieve matan al virus
Es una afirmación que es falsa. “La temperatura normal del cuerpo humano se mantiene en torno a 36,5° y 37°, con independencia de la temperatura exterior o de las condiciones meteorológicas. Por lo tanto, no hay razón para creer que el frío pueda matar el nuevo coronavirus o acabar con otras enfermedades”.
La cocaína no protege
Desde la OMS dejan claro que la cocaína no es un remedio contra el coronavirus: “La cocaína es una droga estimulante y adictiva. Su consumo provoca graves efectos secundarios y es perjudicial para la salud de las personas”.
Puede trasmitirse por la plata
El riesgo de que esto suceda es muy bajo. “Un objeto puede resultar contaminado por el 2019-nCoV si una persona infectada tose o estornuda encima del mismo o lo toca. Mediante una correcta higiene de las manos, el riesgo de infectarse con el nuevo coronavirus (2019-nCoV) por contacto con objetos, como monedas, billetes o incluso tarjetas de crédito, es muy bajo”.
Puede contagiarse a 8 metros
La OMS indica que cuando una persona infectada estornuda o tose, el virus es expulsado a través de unas gotículas que pueden llegar hasta un metro de distancia. “Por lo tanto, para protegerse de los virus respiratorios evite el contacto cercano con cualquier persona que tenga fiebre y tos, y lávese las manos frecuentemente con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón”.
Los barbijos 95 no son reutilizables
“Las mascarillas o barbijos, incluidas las mascarillas clínicas planas y las de filtro N95, no deben reutilizarse. Cuando se ha estado en contacto próximo con una persona infectada por el nuevo coronavirus o por otra infección respiratoria, se debe considerar que la parte frontal de la mascarilla utilizada está contaminada. Para quitársela, no toque su parte frontal. A continuación, elimínela correctamente y lávese las manos con un gel hidroalcohólico o con agua y jabón”.
El peligro de las lámparas ultravioletas
El uso de lámparas ultravioletas para esterilizar manos u otras partes del cuerpo puede causar eritemas, irritación en la piel.
Rociar el cuerpo con alcohol o cloro
“Rociar todo el cuerpo con alcohol o cloro no sirve para matar los virus que ya han entrado en el organismo. Pulverizar estas sustancias puede dañar la ropa y las mucosas (es decir, los ojos, la boca, etc.). Tanto el alcohol como el cloro pueden servir para desinfectar las superficies, siempre que se sigan las recomendaciones pertinentes”.
Paquetes y cartas procedentes de China
En los últimos días se ha bromeado sobre el “peligro” de abrir paquetes que lleguen desde China. Desde la OMS afirman que es seguro hacerlo ya que “gracias a estudios realizados anteriormente, sabemos que los coronavirus no sobreviven mucho tiempo en objetos como las cartas y los paquetes”.
Las mascotas y el coronavirus
Desde la OMS explican que hasta ahora no hay evidencias que demuestren que el coronavirus infecte a animales de compañía como perros y gatos. “No obstante, sigue siendo conveniente lavarse las manos con agua y jabón tras tocar a uno de estos animales para protegerse de varias bacterias habituales que pueden transmitir al ser humano, como E. coli y Salmonella”.
Las vacunas contra la neumonía
Aunque hay quien afirma que estas vacunas sirven para hacer frente al coronavirus, es falso. “Las vacunas contra la neumonía, como la neumocócica y la vacuna contra Haemophilus influenzae de tipo B (Hib), no protegen contra el nuevo coronavirus. El 2019-nCoV es tan nuevo y diferente que es necesario desarrollar una vacuna específica, en la que ya se está trabajando con el apoyo de la OMS”.
“¿El ajo ayuda a prevenir la infección?”
Es otra mentira que circula por las redes. Desde la OMS explican que no hay evidencia que demuestre que el ajo proteja del virus.
“¿Son eficaces los antibióticos para prevenir y tratar la infección por coronavirus?”
Desde la OMS aclaran que “los antibióticos son eficaces contra las bacterias, pero no contra los virus. Puesto que el nuevo coronavirus (2019-nCoV) es un virus, no deben utilizarse antibióticos ni para prevenir ni para tratar la infección”.