Acude al médico inmediatamente si tienes estos síntomas

La enfermedad hepática a menudo no se diagnostica, principalmente porque los síntomas suelen ser leves y vagos.

Los síntomas más aparentes de la enfermedad hepática son:

Dolor abdominal, especialmente después de comer alimentos grasos. 

·        Dificultad para digerir los alimentos.

·        Náuseas y vómitos.

Al mismo tiempo, muchas personas, especialmente las generaciones mayores, y las personas que toman muchos medicamentos sufrirán de alguna forma de enfermedad hepática crónica, a menudo sin saberlo. Para evitar que esto te suceda, presta mucha atención a estos 9 signos de advertencia de enfermedad hepática.

1. Ictericia: color amarillo de la piel y los ojos

Este síntoma es una clara indicación de que algo está mal. Una de las funciones principales de tu hígado es la filtración de sangre: tu sangre vieja se recicla en tu hígado y el producto secundario de ese proceso es algo que se llama bilirrubina. Normalmente, este compuesto se excreta a través del conducto biliar una vez que se acumula en el hígado, pero cuando el hígado no funciona correctamente, ya no puede filtrar la bilirrubina y se acumula en la piel y los ojos, lo que los convierte en un color amarillo.

2. Orina de color oscuro

Si notaste que tu orina se volvió de color muy oscuro últimamente, puede ser un síntoma de enfermedad hepática. Puede convertirse en cualquier color desde el ámbar hasta el naranja oscuro y el marrón, según el color de la orina normal y la gravedad del problema del hígado. La razón por la que esto sucede es la misma bilirrubina que causa la ictericia que no se filtra adecuadamente y penetra en la orina. Si experimentas este síntoma junto con dolor abdominal y otros síntomas que mencionamos aquí, es posible que desees revisar tu hígado.

3. Venas de araña en la cara y parte superior del cuerpo

Estas son pequeñas formaciones rojas en la piel que llevan el nombre científico de los angiomas de araña. Pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo y no son peligrosas por sí solas. Sin embargo, cuando se encuentran en la parte superior del cuerpo y en la cara, podrían indicar un problema con tu hígado. 

4. Pérdida de peso repentina e inesperada

A menudo es una mala señal si de repente pierdes una cantidad significativa de tu peso sin tener la intención de hacerlo. Puede indicar infecciones, problemas digestivos y enfermedades del hígado también. Por lo tanto, si perdiste más del 10% de tu peso en un corto período de tiempo y experimentas algunos de los otros síntomas que mencionamos, tu hígado podría tener problemas.

5. Picazón en la piel

Un síntoma inesperado de una enfermedad hepática es picazón en la piel sin erupción aparente, alergia u otra razón. Si sientes picores, especialmente en la noche, puede ser porque las toxinas están inundando tu piel ya que el hígado no puede filtrarlas como se supone.

6. Una inflamación del vientre

Vientre inflamado, o la acumulación de líquido en el vientre, puede ser el resultado de varios problemas hepáticos, especialmente cirrosis.

Dependiendo del desarrollo del síntoma, tiene diferentes síntomas:

·        La ascitis leve puede causar incomodidad, una sensación de pesadez en el vientre e intolerancia al ejercicio. 

·        La ascitis en sus etapas más avanzadas causará una hinchazón significativa del vientre, dolor y falta de aire porque el líquido que se acumula en el vientre presiona la parte interna de los órganos y diafragma. 

7. Confusión

En etapas muy avanzadas, la enfermedad hepática puede manifestarse en forma de visión borrosa, confusión y dificultad para memorizar y concentrarse en tareas debido a cambios en las conexiones nerviosas. Puede que no te parezca un síntoma muy grave, pero es muy debilitante y apunta a daño en los nervios. Si experimentas este y otros síntomas de enfermedad hepática, te recomendamos que consultes a un médico porque la confusión suele ser un síntoma grave. 

8. Sentirse constantemente cansado y deprimido

La fatiga es la definición formal del síntoma, pero se manifiesta en el cansancio crónico físico y mental y en la falta de motivación. Por lo general, tiene un inicio gradual y puede aliviarse con reposo. Si experimentas fatiga con frecuencia y sin ningún motivo conocido, puede ser un signo de enfermedad hepática.

9. Moretones en la piel 

Nuestros hígados generalmente producen proteínas de coagulación que protegen nuestro cuerpo de la pérdida de sangre. Cuando el hígado está dañado, comienza a producir cada vez menos de estas proteínas, lo que puede hacer que tu piel sea más propensa a tener moretones. Si experimentas hematomas graves sin motivo, puede ser una señal de que tu hígado está dañado.

Permítenos recordarte que los artículos como estos no están destinados a diagnosticar una enfermedad, te recomendamos que hables sobre todos tus problemas de salud con un médico. La información que se proporciona en este artículo es solo con fines informativos.