En momentos de estrés, ansiedad, enojo o tristeza,
algunos de nosotros tendemos a recurrir a la comida para sentirnos mejor. Comer
en exceso por razones emocionales crea una gran barrera para la pérdida de peso,
y también crea una dependencia psicológica y fisiológica con la comida, con la
finalidad de afrontarla emocionalmente. Si sufres de este problema, aquí hay
cinco estrategias que puedes llevar a cabo para que puedas conquistar tu
exceso emocional de una vez por todas:
1. Nombra ese estado de ánimo
Superar el comer excesivamente por razones
emocionales, requiere una comprensión más clara de lo que realmente sucede
cuando alguien se siente inclinado a caer en dicho comportamiento. Intenta
llevar un diario de tu dieta y toma nota de tu estado de ánimo cada vez que
comas. Hacerlo te permitirá identificar cuándo tuviste un episodio de comer en
exceso por cuestiones emocionales. También te ayudará a determinar con qué
frecuencia comes cuando estás de mal humor, a qué hora del día es más probable
que te suceda, así como en qué días de la semana es más probable que te ocurra.
Por último, pero no por ello menos importante, también podrás averiguar qué
alimentos necesitas eliminar.
2. Hacerle frente a la tormenta
Como su nombre lo indica, el comer en exceso por
razones emocionales ocurre debido a que un individuo siente una emoción
negativa. Lo que hace el comer en exceso es distraerte de sentir la emoción y
evitar que dicha emoción siga su curso. Durante el inicio de una emoción
negativa, debes permitirte experimentar lo que estás sintiendo en lugar de
hacer algo para evitarlo. La próxima vez que tengas una emoción abrumadora,
simplemente deja que siga su curso y no realices ninguna acción para evitarlo.
Te sorprenderá de la rapidez con que desaparece la emoción y evitarás comer en
exceso en el proceso.
3. No potencies tus vicios
Cuando recurres a comer excesivamente por razones
emocionales, cuando sientes una emoción negativa, estás potenciando que tu
comida sea más que sólo nutrición. Le das poder sobre ti al permitir que se
convierta en una estrategia de afrontamiento, lo que significa que tu deseo de
hacerlo se intensificará. Te condicionas a ti mismo para creer que la comida es
un requisito para superar los momentos difíciles. Además, si recurres a
alimentos con alto contenido de grasa y/o alto contenido de azúcar, estos
pueden tener un impacto en la parte del cerebro que controla el estrés, lo que
refuerza su dependencia de la sobrealimentación por cuestiones emocionales. Si
realmente debes comer algo, busca frutas o verduras crudas, ya que estos
alimentos tendrán poco o ningún efecto en tu actividad cerebral.
4. Aprende mecanismos de afrontamiento saludables
En lugar de recurrir a mecanismos de afrontamiento
poco saludables, como el abuso de sustancias o pasar muchas horas seguidas
frente al televisor, debes recurrir a los más saludables, como hacer
ejercicio o hablar con un amigo que te brinde apoyo. Al considerar una
estrategia de afrontamiento que probablemente funcione para ti, debes
preguntarte: ¿Hacer esto me hará sentir mejor o peor ahora? Y ¿Al hacerlo me
hará sentir mejor o peor mañana? Si la respuesta a ambas preguntas es mejor,
entonces es probable que sea un mecanismo de afrontamiento saludable.
5. Convertirte en un maestro en los tiempos difíciles es la clave del
éxito a largo plazo
Hay muchos que no se comprometen a perder peso
debido al tiempo ocupado y estresante en sus vidas. Estas personas se conocen
como ‘perdedores de buen tiempo’, lo que significa que son capaces de perder
peso y vivir sanamente sólo cuando todo en sus vidas está tranquilo. La clave
para vivir verdaderamente de manera saludable es desafiarte a ti mismo para
mantenerte saludable, incluso cuando la vida se vuelva estresante. JQ
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